Vivienda informa a 880 familias de Gipuzkoa que pueden ver reconocido su derecho a un piso

El Gobierno Vasco ha comunicado por carta a 3.544 unidades convivenciales (880 en Gipuzkoa) que cumplen los requisitos para que les sea reconocido el derecho subjetivo a una vivienda. En la misiva se incluye el formulario para que puedan realizar la solicitud y una explicación sobre el proceso. Además de las guipuzcoanas, han recibido la notificación 2.160 familias de Bizkaia y 504 de Álava.

El Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes que dirige Iñaki Arriola (PSE) explica que se trata de personas inscritas en Etxebide que, cumpliendo las condiciones planteadas por la ley, todavía no lo han tramitado.

Para que se reconozca el derecho subjetivo de acceso a la ocupación legal de una vivienda «digna y adecuada» se debe ser mayor de edad o menor emancipado y carecer de vivienda, así como estar registrado como solicitante de vivienda protegida en alquiler en Etxebide con una antigüedad mínima de cuatro años.

Además, se debe contar con unos ingresos anuales ponderados inferiores a 9.000 euros si se trata de una persona, a 12.000 en familias de dos miembros, y a 15.000 si son familias de tres o más integrantes.

El reconocimiento del derecho subjetivo puede suponer la adjudicación de una vivienda en régimen de alquiler o, en el caso de que no existan pisos disponibles, el acceso a una prestación económica para el pago del alquiler privado, con un máximo de 250 euros mensuales, que deben ser destinados exclusivamente a este fin.

Vivienda notifica periódicamente a los eventuales beneficiarios que no han reclamado su derecho la posibilidad que tienen de optar a una vivienda.

Así, en 2018 se remitieron 4.450 cartas, en 2019 otras 2.860, el año pasado fueron 5.039, y ahora han sido 3.544. De ellas, tras la puesta en marcha de la Ley de Vivienda aprobada en 2015, en Euskadi se ha reconocido ya el derecho subjetivo a 6.046 familias. De ellas, 4.153 corresponden a Bizkaia, 1.017 a Álava y 876 a Gipuzkoa.

Este derecho se configura en favor de quienes, no disponiendo de una vivienda digna y adecuada, carecen de los recursos económicos precisos para conseguir una.