Serge Haroche: «Es peligroso confundir teorías científicas con opiniones y creencias religiosas»

- 'Reflexiones sobre la verdad científica' es el título que ha elegido usted para su conferencia plenaria de esta tarde. ¿Por qué?

- He elegido hablar sobre la verdad científica porque vivimos en un momento en que la ciencia está bajo ataque, con el desarrollo de noticias falsas y teorías de conspiración. Ahora hay una tendencia a emitir dudas sobre la ciencia y a confundir las teorías científicas con opiniones y creencias religiosas. Esto es peligroso porque la ciencia es más necesaria que nunca para afrontar los desafíos a los que se enfrenta la humanidad. Creo que el público en general debe tener un mejor conocimiento de los valores del método científico, que ha estado buscando la verdad desde el comienzo de la revolución científica en el siglo XVII.

- ¿Existe una verdad científica?

- Sí, hay una verdad científica. Se basa en la observación de fenómenos naturales, en la elaboración de modelos que explican estos fenómenos y predicen otros nuevos, con un intercambio permanente entre experimentos y teorías. La verdad de las teorías evoluciona cuando las observaciones inesperadas no pueden explicarse mediante modelos existentes. Poner a prueba las teorías de las observaciones que se vuelven cada vez más precisas con la mejora de las tecnologías es la práctica estándar del método científico. Esto significa que la verdad científica es evolutiva, tiende a un objetivo de mayor precisión y previsibilidad. Esta búsqueda de la verdad ha llevado a grandes inventos, que la mayoría de la gente da por sentado. El hecho de que los avances tecnológicos modernos hayan mejorado nuestras vidas y beneficiado nuestra salud demuestra que existe una verdad científica. La construcción de la verdad científica se basa en la duda racional, que es completamente diferente de la duda destructiva profesada por los propagadores de las teorías de la conspiración y los relativistas culturales. A diferencia de los beneficios de la ciencia real, nunca ha habido progreso por parte de negadores de verdades científicas o teóricos de la conspiración cuyas acciones siempre han hecho un gran daño a la sociedad.

- ¿Es la física la mejor elección para acercarse a esa verdad científica?

- No hay una opción preferida para abordar esta verdad. El método científico es igualmente válido en física, química o biología que buscan la misma verdad en diferentes áreas. Puedo agregar que esta verdad se demuestra por el progreso de las tecnologías que a menudo se basan en la investigación interdisciplinar. Han surgido nuevos materiales en la interfaz entre física y química. Nuevos fármacos han surgido de investigaciones que combinan biología y química.

- La Real Academia de Ciencias sueca le otorgó el premio Nobel de Física en 2012 a usted y al estadounidense David J. Wineland por sus investigaciones, por abrir una «nueva era» en la física cuántica. Una vez logrado este galardón, ¿cómo se afronta el resto de la carrera profesional? ¿Cómo se asimila algo así?

- Recibir el Premio Nobel es, por supuesto, un gran honor. También hay una parte de suerte porque ahora hay una comunidad global de científicos muy grande y solo unos pocos pueden recibir esta distinción. Cuando se te otorga el premio y se proyecta en el centro de atención por el prestigio que se le atribuye, sientes que tienes el deber de hablar en nombre de todos los colegas que trabajan en el mismo campo, para que su investigación sea conocida y apreciada por un audiencia amplia. En general, creo que es mi deber explicar los valores de la ciencia y la necesidad de la educación, especialmente la educación científica en todos los niveles.

- ¿Por qué eligió la física?

- Cuando era niño, amaba las matemáticas, la geometría y el cálculo y me sorprendió el hecho de que los fenómenos físicos, como las leyes de la mecánica y el movimiento de los planetas obedecían a las leyes matemáticas. Era la época de los primeros satélites artificiales y de la carrera hacia la luna. Hubo un gran entusiasmo por la ciencia y por la física en particular. Entrar en el campo de la física fue natural para mí.

- Los representantes institucionales del país estarán presentes en su conferencia plenaria de hoy, ¿qué mensaje deben tener claro los políticos para situar la ciencia en el centro del debate social?

- Estoy seguro de que los políticos entienden que la educación es el servicio público más importante que un Estado puede brindar a sus ciudadanos y que la ciencia es esencial para afrontar los desafíos que enfrentamos, ya sea el cambio climático, la necesidad de energía renovable, la agricultura sostenible, la protección contra las epidemias, etc. Cuando hablo con políticos, todos están de acuerdo en eso. El problema es que les resulta muy difícil pasar de declaraciones generales a acciones prácticas. Están limitados por su credo económico, sus presupuestos restringidos y su agenda política a corto plazo. Tienen que entender que la ciencia es esencial y que necesita tiempo y confianza para prosperar.

- El festival P4K desea acercar la ciencia a la ciudadanía, aumentar el grado de cultura científica de la sociedad. ¿Es optimista o pesimista con este objetivo a nivel global?

- Creo que estos objetivos son esenciales. Los políticos comenzarán a moverse en la dirección correcta, adoptarán medidas para mejorar la capacitación en ciencias de los alumnos y estudiantes, y gastarán más en educación e investigación solo cuando los ciudadanos los presionen a hacerlo. Todo lo que se puede hacer para acercar a los ciudadanos a la ciencia es importante a ese respecto. Las demostraciones de jóvenes estudiantes de todo el mundo sobre el tema climático van en la dirección correcta para que los políticos sean más sensibles a la urgencia de una acción real. Dicho esto, debo reconocer que el estado del mundo en la actualidad dificulta que cualquiera sea optimista. Pero tenemos que luchar y esperar que al final prevalezca la racionalidad.