Museos, polideportivos e iglesias, los mejores refugios ante los 40º previstos este domingo
Gipuzkoa se convierte este domingo en un horno que ha obligado a activar el aviso naranja y a acondicionar espacios para refugiarse
Gipuzkoa vivirá este domingo una jornada asfixiante con temperaturas que superarán los 41 grados en municipios del interior y que rozarán este valor en ... la costa. Serán 24 horas de sofocón que alcanzarán su punto álgido a partir de las 13.00 horas, cuando se activará la alerta naranja por temperaturas altas extremas. Ante estas previsiones, se recomienda tomar precauciones para que la salud no se resienta, sobre todo a los colectivos más vulnerables, como niños, ancianos o embarazadas.
Ingerir líquidos, acudir a los refugios climáticos repartidos por diferentes municipios guipuzcoanos, evitar la exposición al sol y no realizar esfuerzos físicos son algunas de las pautas que podemos seguir para evitar sustos.
Dónde refugiarse. Acudir a lugares frescos como interiores con aire acondicionado es la mejor alternativa en días de calor extremo. Los museos, polideportivos, iglesias, centros comerciales o bibliotecas son los mejores refugios para quienes desean salir de casa y no asfixiarse.
Las diferentes ciudades y municipios de Gipuzkoa tienen un plan con espacios seguros para estas ocasiones. Donostia, por ejemplo, cuenta con 53 refugios exteriores y 36 interiores repartidos por sus barrios. Entre los exteriores se encuentran sus 300 hectáreas de parques y zonas verdes, como Cristina Enea o el parque de Aiete, donde la sombra de los árboles hace más llevadero el calor. Los interiores se ubican en bibliotecas, casas de cultura, museos, polideportivos, mercados e incluso iglesias. Así, visitar el museo San Telmo, recorrer el túnel de cristal entre peces y tiburones del Aquarium, o acercarse al centro cultural de Tabakalera son buenas opciones para hoy cuando el termómetro se dispare.
La recomendación en estos refugios de interior es que la temperatura sea inferior a los 26 grados y que cuenten con los medios adecuados para descansar y ofrecer comodidad, como pueden ser asientos, aseos o fuentes. Estos refugios están debidamente identificados mediante un cartel en la puerta y son accesibles para todas las personas. Además, según el Ayuntamiento de Donostia, que tiene su propia red, estos espacios donde la ciudadanía se puede proteger del calor están preparados para poder ser usados entre mayo y octubre.
Irun también cuenta con su propio plan para combatir las olas de calor. El Ayuntamiento de esta localidad tiene identificados hasta 38 espacios climáticamente confortables a los que la ciudadanía puede recurrir cuando el mercurio suba. Nueve son interiores y veintinueve exteriores. Casi todos públicos, aunque alguno también es privado. Así, los refugios interiores son el CBA, Palmera Montero Gunea, Centro Comercial Mendibil, las recepciones de los polideportivos Azken Portu y Artaleku, Ducourau (Bidasoa activa) y los colegios de Belaskoenea, Lekaenea-Anaka y Eguzkitza. Entre los exteriores aparecen los parques Sargia, Soroxarta, Belartza, Harrobieta, Beko Errota, Ibarla, Alai Txoko y Julian Sanchez, el jardín de la Residencia Ama Xantalen, el frontón y parque de Ventas y las instalaciones deportivas Ugalde Ventas. También paseos pegados a algunas regatas o algunas calles que por su configuración pueden servir de refugio en un momento dado o aliviar la circulación peatonal por la ciudad.
Ingesta de líquidos. Mantenerse hidratado es algo fundamental en nuestro día a día, pero más si cabe en días como los de hoy. Aunque no tengamos sed, hay que obligarse a beber entre 1 y 1,5 litros diarios, tanto de agua como de zumos naturales, y de manera más controlada en el caso de niños y personas mayores.
¿Qué comer? A veces, con el calor comienza la apatía hasta con la comida. Sin embargo, es esencial tomar comidas ligeras y aumentar el consumo de ensaladas, verduras y frutas para reponer las sales minerales que se pierden por el sudor.
El hogar, fresco. No todos los ciudadanos disponen de aire acondicionado o un ventilador en el hogar, pero hay otras formas para mantener un poco más fresca la casa. ¿Cómo? Durante el día, debemos tener las persianas bajadas y por la noche, cuando refresque un poco, abrir las persianas y las ventanas para que ese aire entre en la vivienda.
Nuestro cuerpo. Para mantener nuestro cuerpo lo más fresco posible, es recomendable tomar duchas frías o poner toallas empapadas de agua por nuestras extremidades. Un abanico nunca está de más. Si tenemos que salir a la calle, hay que evitar las horas de más sol. Sobre todo hay que tener cuidado entre las 12.00 y las 16.00 horas. Si no queda otro remedio y hay que salir al exterior, viste ropa ligera y lo más clara posible, ya que la negra absorbe el calor del sol. Utiliza protección solar, gafas de sol y un gorro o una visera.
¿Si voy en coche? Antes de comenzar el viaje, abre las ventanillas para que se airee el vehículo. Si hace mucho calor fuera, arranca y pon el aire acondicionado para ventilar antes de subirte en él. Hidratarse sigue siendo clave. Tener agua fría en el coche e ir bebiendo poco a poco para que no sea perjudicial. Además, en días de calor es aconsejable no abusar de bebidas azucaradas y excitantes como el café. Las horas seguidas de conducción se deben reducir y se han de tener controlados los aparcamientos que existen en la zona a la que te diriges. Mantener el coche a 22º es la temperatura óptima para la conducción. Utiliza ropa holgada y ligera. Una camisa fina que cubra tus brazos aliviará la sensación de calor en la piel. La última recomendación es no esperar a alguien dentro del automóvil si la temperatura es alta. Tampoco dejes a mascotas ni a niños dentro del vehículo aunque sea por espacios cortos de tiempo.
Golpes de calor. A pesar de tomar precauciones, en ocasiones se sufren golpes de calor. ¿Qué hacer ante una persona con un golpe de calor? Lo primero, llamar al 112. Colocar al afectado en un lugar a la sombra. Quitarle la ropa para airearle. Si está consciente, colocarlo con la cabeza ligeramente elevada y ofrecerle abundante agua. Eso sí, nunca se debe dar líquidos a una persona inconsciente. Refrescarle con agua fría o hielo, sobre todo la cara y las axilas. Si está inconsciente, colocar a la persona con las piernas flexionadas.
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