Cómo extremar la precaución para evitar accidentes en verano

Una vez adentrados en pleno verano y viendo que las temperaturas cada vez van creciendo, la Cruz Roja ha presentado este viernes su nueva campaña de prevenciones de cara al verano, en el Paseo de Zurriola delante de todos los ciudadanos. Campaña titulada como 'Este verano quiérete mucho', consiste en varios consejos que nos pueden servir a la hora de ir a las playas y a las piscinas, y los peligros que podemos encontrar en ellas, y como poder evitarlas.

La Cruz Roja realiza esta campaña desde hace 11 años aproximadamente. El objetivo de realizar esta campaña no es otra que recordar los riesgos que podemos encontrar en estas áreas, y aconsejar sobre cómo evitarlas. Durante los próximos meses de verano dicha campaña recorrerá Beasain, Eibar, Elgoibar, Deba, Azkoitia, Errenteria, Lezo, Oiartzun y los barrios de Altza y Larratxo.

En el agua hay que tener mucho cuidado ya que pueden tener repercusiones muy graves que pueden poner en riesgo nuestra propia vida. Siguiendo unas mínimas medidas de seguridad, se pueden evitar ahogamientos, golpes de calor, quemaduras solares, insolaciones, picaduras o cortes de digestión.

La primera recomendación que da Cruz Roja es la de beber abundantes líquidos, aunque no se tenga sed. Destacan también la de usar protectores solares, aplicándolos media hora antes de la exposición al sol; hacer comidas ligeras y tomar comidas con abundantes sales minerales, que se pierden con el sudor, como ensaladas, gazpacho, frutas y verduras.

También se subraya no tirarse de cabeza en zonas de fondo desconocido, evitar entrar al agua de forma brusca y respetar siempre las indicaciones de las banderas y de los socorristas.

Según informa la organización, los minutos que siguen al accidentes pueden ser vitales para la victima. Por ello es importante actuar con orden y serenidad. Cruz Roja cuenta con un esquema de actuación denominado P.A.S. (Proteger, Avisar y Socorrer).

1

Proteger el lugar del accidente:

- Haz seguro el lugar con el fin de evitar que se produzca un nuevo accidente. Según la situación será necesario, por ejemplo, avisar a los bañistas del peligro existente (corrientes, medusas, etc,), balizar la zona para informar de la existencia de cristales en la arena, o piedras a poca profundidad, etc.

2

Avisar a los servicios de emergencia:

- Si existe servicio de vigilancia y salvamento en la zona pide ayuda al puesto de socorro más próximo.

- Si no existe servicio de vigilancia y salvamento y, según la gravedad de la situación, llama al teléfono de emergencias 112. Si la situación no reviste gravedad, acude al Centro de Salud más próximo.

3

Socorrer a los heridos:

- Si una persona se encuentra «en apuros» en el agua, intenta acercarle un objeto al que pueda agarrarse para mantenerse a flote, hasta la llegada de los especialistas. Nunca te tires al agua para socorrer a alguien en peligro si no has recibido formación específica para ello…!!

- Controla las funciones vitales de la víctima. Lo primero es valorar los 'signos vitales' para saber cómo están funcionando el cerebro (consciencia), los pulmones (respiración) y el corazón.

- Evita movimientos bruscos al accidentado, ante el riesgo de que se haya producido una lesión en la columna vertebral.

- Asegúrate de que está consciente. Si el herido no reacciona al hablarle, tocarle o estimularle suavemente, con un pellizco por ejemplo, probablemente está inconsciente.

- Comprueba que respira «con normalidad». Para saber si una persona respira espontáneamente, debes 'ver, oír y sentir' su respiración. Si no respira con normalidad, adminístrale 5 insuflaciones ó respìraciones de rescate, e inicia las compresiones torácicas externas, (alternando 30 compresiones y 2 ventilaciones), a un ritmo de 100-120 compresiones por minuto, hasta que llegue el equipo de emergencias.