Nerea Garmendia: «Soy de terraza aunque sea con plumífero»

Nerea Garmendia no se ha aburrido durante el confinamiento. La actriz beasaindarra vivió en Alicante «dos meses muy duros», antes de viajar a Madrid por trabajo y regresar a Donostia hace unos días. Pese a las dificultades vividas durante estas semanas, hace un balance personal positivo: «Me ha venido muy bien para darme cuenta de muchas cosas. De que por inercia trabajas y dedicas más tiempo a tu trabajo que a lo que realmente te interesa, a tus hobbies». Así, durante el confinamiento «me he podido dedicar a mí». También se ha sorprendido: «He sido de las que ha hecho una compra potente, y me ha ayudado a ver que muchas veces compramos más de lo debido».

La gastronomía es una de sus pasiones. Admite que «soy una loca de la comida» y que «intento hacer las quedadas en los restaurantes». En estos momentos tan difíciles para el sector, se muestra sensible con los hosteleros: «Comer fuera tiene su ritual: salir de casa, saber que te van a tratar bien... no es lo mismo que cocinar en casa».

Tiene su lista de preferidos, dependiendo del lugar en el que esté. En Beasain, su localidad natal, destaca «Asador Urkiola con su besugo, su lubina, su txuleta rica... es una maravilla». En la capital guipuzcoana apunta a Portuetxe, «que es muy top», aunque su debilidad está en Tolosa, Casa Julián: «Me rechiflan sus txuletas, son gloria».

Si hay un espacio que tiene enamorada a Nerea son las terrazas. Confirma que «soy de terraza aunque sea con plumífero». Valora enormemente las que visita en Donostia, por encima de las que puede encontrar en Madrid, porque estas últimas «están muy cerca de la carretera».

No se espera que Nerea tenga que tirar de abrigo de invierno en los próximos meses, pero la beasaindarra garantiza pasarse por varias de las terrazas de los bares y restaurantes guipuzcoanos para disfrutar de una gastronomía y un ambiente que la tienen enganchada.