Siete delitos de «extrema y máxima gravedad» cometidos por adolescentes
Se trata de seis casos de agresiones sexuales y un intento de asesinato cometidos el año pasado
En su memoria, la Fiscalía recoge los delitos de «extrema y máxima gravedad» cometidos por menores de edad en Gipuzkoa durante el año pasado. ... Seis de ellos fueron agresiones sexuales a menores de 16 años, además de un posible intento de homicidio.
Estos ilícitos son calificados de esta manera por la alarma que supone que los lleven a cabo menores de edad, y la Fiscalía hace un breve resumen de cada uno.
En enero de 2022 se produjo una violación entre menores de edades similares que residían en un centro de la Diputación. Él fue condenado a una medida de libertad vigilada y trasladado a otro recurso residencial.
En marzo se produjo un delito de tocamientos y penetraciones bucales a dos jóvenes de 15-16 años. Al acusado se le prohibió aproximarse y comunicarse con las víctimas hasta el juicio, que está pendiente de señalarse. Otro de los casos es el de la menor de 14 años que denunció haber sido violada en el barrio de Riberas de Loiola de San Sebastián. La Fiscalía guipuzcoana adoptó la medida cautelar de internamiento en régimen cerrado para el acusado.
Otro de los casos se refiere a un adolescente, monitor deportivo, que realizó tocamientos a dos niñas de 12 y 13 años durante una competición deportiva. Se adoptó la medida de libertad vigilada para el acusado y no se establecieron prohibiciones, ya que las víctimas residían en otra comunidad autónoma. Aún está pendiente que se haga una exploración de las menores por parte de la Fiscalía correspondiente.
Apuñalamiento
El único caso de gravedad que no consistió en un delito contra la libertad sexual fue un apuñalamiento por parte de un menor, en el que este profirió a la víctima frases como «sal de aquí que te mato». El delito aún está pendiente de calificar, ya que queda pendiente el informe forense que debe determinar el carácter mortal o no de las lesiones. El autor del apuñalamiento se encuentra recluido en un centro de menores en régimen cerrado.
Los otros dos casos de violencia sexual fueron cometidos por un adolescente que penetró a su exnovia de 14 años (la edad de consentimiento legal está en los 16), y por otro que realizó tocamientos y un intento de penetración bucal con violencia a una menor de 16 años. Al acusado se le prohibió comunicarse con la víctima y aún está pendiente el informe técnico del caso.
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