Citas a ciegas por San Valentín
Mes de los enamorados. Una empresa guipuzcoana organiza encuentros anónimos para que personas solteras se conozcan y, si hay flechazo, encuentren el amor
Febrero es el mes del amor, de la alegría y la amistad. Los parques, las cafeterías, las tiendas e incluso las redes sociales se llenan ... de muestras de amor de parejas que comparten su felicidad a los cuatro vientos. Pero no todos viven estos días con la misma ilusión. Para quienes Cupido ha esquivado últimamente, ha llegado a Donostia un evento «diferente» y «curioso» que invita a los solteros a sentir ese flechazo y encontrar a esa persona. Un método conocido, pero poco habitual: las citas a ciegas.
Uno de los pretendientes que se animó a participar en el primero de los tres encuentros previstos para este mes fue Iñaki. Con él se formó un grupo de 12 personas, seis chicos y seis chicas, en busca del amor. «Es curioso, divertido. Llevo tiempo soltero y, aunque he tenido mis cositas, he querido darle una oportunidad a esta nueva manera de conocer gente», apunta. El plan de citas se le presentó vía móvil. «Me metieron en un grupo de WhatsApp, mencionaron el evento y quise probar suerte. El formato es sencillo», avanza. «Cada pareja tiene 10 minutos para conocerse y, al término de ese tiempo, nos levantamos y vamos a por otro soltero». No parece mucho tiempo, pero en palabras del organizador, es «más que suficiente para dar ese primer paso».
«Personas de carne y hueso»
Una fuerte conexión puede hacer que el tiempo se esfume antes de lo deseado. Es lo que les ocurrió a Javier y Cristina. Cansados de no tener suerte a través de aplicaciones para ligar, quisieron «romper con las pantallas». «Esto es algo distinto. Los que estamos aquí venimos a lo mismo: conocer gente nueva. Puede que surja el amor o una buena amistad, pero estamos más tranquilos porque sabemos que vamos a tratar con personas de carne y hueso. Conocer a alguien a través de una pantalla es más frío y nunca sabes quién está realmente al otro lado», apuntan. Ellos hicieron 'match' pero tuvieron que esperar al día siguiente para asegurarse de que ambos querían seguir conociéndose.
Cada participante tiene que entragar al final de la cita una hoja, en la que apuntan el nombre de las otras personas y responden a una pregunta: «¿Me gustaría volver a verle?». En la respuesta está el futuro de esa posible relación.
Detrás de las reuniones se esconde la empresa guipuzcoana Lonoti y son ellos los encargados de comunicar a los participantes si algún pretendiente está interesado en conocerle más. «El objetivo de venir es no hacerlo más», remarca Javier. Por el momento, la empresa tiene previstas dos citas más este mes de febrero para las que habrá que inscribirse a través de su página web.
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