«La gastronomía y los hoteles son aliados»

Nada más cerrar el verano en Donostia con los ecos del Zinemaldia todavía recientes, los hoteles de la ciudad y del territorio se preparan para acoger desde hace 25 años otro de los platos fuertes del calendario: San Sebastian Gastronomika.

Hoteles de Gipuzkoa ha premiado este jueves al reconocido congreso culinario por su contribución a que «el verano se alargue» desde 1998. Raúl Fernández, presidente de la asociación, ha destacado en la entrega del galardón en Chillida Leku que con «la celebración del Congreso en el mes de octubre la curva de estacionalidad se suaviza». También ha subrayado que el congreso «suma, enriquece y ayuda» en los esfuerzos de Hoteles de Gipuzkoa «por mejorar la calidad del 'Área Alimentos y Bebida'» de sus alojamientos. En ediciones anteriores este galardón lo han recibido desde el Jazzaldia al club Fortuna con su Behobia-San Sebastián, el Zinemaldia o Iñigo Olaizola (Donosti Cup), entre otros. «El premio Hoteles de Gipuzkoa pretende reconocer a personas o entidades que, como consecuencia de su actividad, son generadores de ocupación», ha manifestado Fernández.

San Sebastian Gastronomika, impulsada desde El Diario Vasco y que reúne a los mejores cocineros del mundo en torno al Kursaal, celebra este año sus bodas de plata. En cada edición acuden miles de visitantes con ganas de aprender de la mano de los mejores en los fogones y de disfrutar de Donostia y Gipuzkoa. En este maridaje, el alojamiento es indispensable. «Los hoteles guipuzcoanos también han ayudado mucho al éxito del congreso», señala Roser Torras, directora de San Sebastian Gastronomika. «Los asistentes, ya sean cocineros o congresistas, necesitan alojamiento, vienen a disfrutar y se encuentran muy bien acogidos. Además, desde la organización siempre hemos contado con la complicidad del sector, que nos ha ayudado en todo lo que ha podido», destaca.

En el mismo sentido se manifiesta el presidente de la división de Gastronomía de Vocento, Benjamín Lana. «Es un trabajo realizado conjuntamente durante estos 25 años. Al principio no había tanta conciencia de qué iba a suponer la gastronomía para el territorio. Por supuesto se había iniciado la nueva cocina vasca, pero nadie se imaginaba hasta dónde iba a llegar la gastronomía como nuevo acontecimiento social transformador», explica. «Recibimos el premio desde el máximo agradecimiento».

«La oferta hotelera ha ido creciendo y compite con un producto turístico de calidad como es el de San Sebastián», indica Lana, quien se fija en sus viajes en la oferta culinaria de sus alojamientos. «Cuando un hotel descuida su oferta gastronómica descuida de alguna manera al cliente. Creo que pierde una oportunidad, la gastronomía ayuda a tener un relato propio». En Donostia, Lana subraya la creciente apuesta de establecimientos hoteleros que «acogen a jóvenes promesas con proyectos culinarios importantes. Los hoteles vuelven a mirar a la gastronomía como lo que son: aliados».

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