«Trabajamos en el cultivo ético de carne por la propia necesidad de proteínas»

- ¿Qué grado de desarrollo cuenta su proyecto?

- Comenzamos a desarrollar el proyecto en Nanogune. Después, invertimos en equipos y nos hemos unido a unos expertos de primera fila con el que ya sólo queda su producción industrial. La base de este proyecto de I+D parte de entornos biológicos controlados y sin intervención o modificación genética.

- ¿Este cultivo de carne producirá ahorros energéticos?

- La ganadería intensiva no da abasto ya que existe una producción masificada y se han generado una serie de impactos negativos, como la fiebre porcina o las 'vacas locas'. Los consumos de agua son increíbles en las explotaciones tradicionales. A día de hoy, la cría de ganado genera el 25% del consumo total de tierra y agua del planeta, y el 15% de gases de efecto invernadero.

- ¿Cuándo podremos ver los productos en el mercado?

- Después de superar varias fases de desarrollo nos planteamos poner en marcha una planta industrial en el que desarrollaremos nuestros productos. La cosa no es fácil pero para el próximo año podremos tener productos en el mercado. Su salida al mercado propiciará una solución al alto coste en vidas animales y recursos naturales que supone abastecer la alta demanda de proteínas de carne.

- Además, la demanda de proteínas va en aumento.

- La demanda de proteínas a nivel mundial en 1980 fue de 200 millones de toneladas frente a los 600 previstos para 2020; 700 en 2030 y 1.000 millones de toneladas en 2050 (carne y pescado fundamentalmente).

- ¿Qué supone para la empresa ganar los premios Toribio Echevarria?

- Es un respaldo muy importante. Es un premio con prestigio y cuenta con un jurado mutidisciplinar de primera fila.

- ¿Además, usted tiene ascendencia eibarresa?

- Sí, mi tatarabuelo fundó en Eibar la empresa Charola y Aniua. Encontramos en Argentina una pistola que fue fabricada por ellos. De inmediato la compramos a un coleccionista.