Moncloa renovará el escudo antiopas el día 23 y condicionará la 'operación Talgo'

El fondo estadounidense exige 5 euros por acción -186 millones por su participación en Talgo-, frente a los 4 que como máximo ha ofrecido Jainaga, lo que significa valorar la compra del 29,9% de las acciones del fabricante, y sin tener que hacer una opa, en 150 millones. Es el punto, junto al retraso en la entrega de información, que ha dejado la negociación en vía muerta, hasta el punto de que este domingo el propio Jainaga amagó con dejar la operación.

Ante este escenario, según ha confirmado este medio de fuentes conocedoras de las negociaciones, el Gobierno central aprobará el próximo lunes, día 23, la renovación vía decreto del escudo antiopas, que expira a final de año. Una modificación de la ley que regula el movimiento de capitales exteriores en vigor desde la pandemia. Habilita al Consejo de Ministros para autorizar inversiones foráneas sobre compañías españolas y de carácter estratégico, incluidas las que vienen de la Unión Europea. Es la vía que empleó La Moncloa para vetar la opa húngara sobre Talgo de Magyar Vagon.

Las mismas fuentes indican que si la empresa polaca participada por el fondo público PFR presentara una opa por Talgo, sería muy complejo vetar la operación, pero el escudo antiopas sería una manera de proteger a Talgo, que para el Gobierno es una empresa estratégica, poniendo condiciones como el mantenimiento del empleo y sedes en España, así como la presencia de un socio nacional en la compañía.

Es un movimiento que ya anunció el ministro de Economía, Carlos Cuerpo en una entrevista a este periódico, pero que llega en un momento en el que las partes están constatando la falta de avances de Sidenor. Jainaga no logra siquiera un acceso fluido a las cuentas de Talgo. El respaldo que tiene de los gobiernos central y vasco, dispuestos a aportar capital en la operación, no es suficiente y la operación no logra avances.

Mientras tanto, el representante de Trilantic, Javier Bañón, sigue ganando tiempo y desde el 1 de enero verá incluso como se le abren más opciones. En esa fecha expira el pacto de socios con algunos de los principales accionistas, como Torreal. Por lo tanto, podrá vender su parte sin tener que meter en la operación a esos acompañantes. ¿Qué ocurriría si Trilantic vende sus acciones a la polaca PESA en vez de a Sidenor? ¿Podrían condicionar la operación el resto de accionistas? ¿Podrían forzar una opa con su reacción? Son dudas que asaltan esa vía.

Mientras tanto, ayer, el presidente de Talgo, Carlos de Palacio, participó en un acto navideño en la planta de Rivabellosa (Álava) con la plantilla, que asciende a 700 personas. De Palacio, preguntado por algunos trabajadores, trasladó que Sidenor es una alternativa que «me gusta» en la medida en que garantiza el proyecto industrial en España. Y destacó la carrera profesional de Jainaga.

UGT envió un comunicado en el que defendió también la alternativa de Sidenor en la medida en que es la «única que garantiza la continuidad de las operaciones en España». Un mensaje que el sindicato justificó ante la aparición de otras alternativas extranjeras.