El salario mínimo subirá un 8% hasta los 1.080 euros en 2023
El presidente Pedro Sánchez realiza este anuncio en el Senado después de que Yolanda Díaz cogiera las riendas de la negociación tras fracasar la primera reunión con los sindicatos
El Gobierno subirá el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) un 8% en 2023 hasta situarlo en los 1.080 euros al mes repartidos en 14 pagas. Así lo anunció este martes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Senado, precisamente en el momento en que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, estaba reunida de urgencia con los sindicatos para alcanzar un pacto. La CEOE, por tercer año consecutivo, vuelve a descolgarse de un acuerdo tripartito e incluso se negó a acudir a la mesa de negociación, ratificando así la cada vez mayor tensión que hay entre la patronal y el Gobierno, y más concretamente con el Ministerio de Trabajo, al que acusa de «traidor» por incumplir el acuerdo alcanzado con la reforma laboral.
La subida de 82 euros al mes beneficiará a unos 2,3 millones de trabajadores –según estimaciones realizadas por CC OO- y tendrá efecto retroactivo desde el pasado 1 de enero. De esta forma, las empresas tendrán que actualizar las nóminas en febrero y pagar también el alza correspondiente a enero. Por este nuevo aumento las compañías y los autónomos tendrán que asumir un sobrecoste de más de 3.000 millones de euros.
El Gobierno finalmente se ha decantado por la franja alta de incremento recomendado por el comité de expertos, que el pasado mes de diciembre envió al ministerio un informe en el que estimaba que el salario mínimo debía situarse entre 1.046 y 1.082 euros al mes para alcanzar el 60% del salario medio, que es el compromiso de legislatura que había adquirido el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez para así cumplir con lo que manda la Carta Social Europea.
Nuevo plante de la CEOE
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, tomó este martes las riendas de la negociación acerca del nuevo salario mínimo interprofesional (SMI) para 2023 después del fracaso de la primera reunión convocada a tal efecto y de la que se ausentó la CEOE, que se mantiene en sus trece en su negativa a negociar con el Ministerio de Trabajo, al que acusa de «traidor» por incumplir el acuerdo alcanzado en la reforma laboral.
La primera reunión que mantuvo este martes el Ministerio de Trabajo, liderada por el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, fracasó en su intento de alcanzar un acuerdo con los sindicatos, quienes ya habían advertido que «no hay más cuerda» y este martes debía concluir la negociación. Por ello, Díaz cogió la batuta del diálogo social y convocó de inmediato a los líderes de los dos sindicatos mayoritarios, Pepe Álvarez, por parte de UGT; y Unai Sordo, de CC OO, con el objetivo de cerrar un nuevo acuerdo bilateral, ante la posibilidad de alcanzar uno en el que también esté la patronal.
Tanto el ministerio como las organizaciones de los trabajadores cargaron contra la CEOE por la «irresponsabilidad» de no acudir a negociar. «Me apena profundamente que la patronal española no esté sentada en la mesa, una medida que va a afectar a millones de personas no puede tener una patronal ausente, que no venga a escuchar lo que el Gobierno tiene que decir. Es una irresponsabilidad», denunció antes de la primera reunión el secretario de Estado, que incidió en que «no es de recibo» que la CEOE «se desentienda» de «una de las decisiones más importantes que en materia laboral va a tomar el Gobierno durante el año 2023».
Los empresarios, sin embargo, echaron la culpa al Gobierno por no haber presentado a lo largo de todo el mes un planteamiento y por no haber respondido a su propuesta, que enviaron el pasado 21 de diciembre, en la que se abrieron a asumir una subida del 4% hasta los 1.040 euros al mes a cambio de que se indexen los contratos públicos a este alza, para que las empresas puedan repercutirlo, y se rebajen un 20% las cotizaciones del sector agrario.
«Si yo mando a alguien a la mesa, porque va gente técnica, no tiene capacidad de decir sí o no porque no tenemos una propuesta. Lo mínimo es mandar una propuesta«, denunció el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi.
Garamendi reprochó a Díaz que «solo busca una foto» y recordó que la subida del SMI es una facultad del Gobierno, previa consulta a los agentes sociales, y esta ya se había realizado en una mesa de diálogo el pasado 21 de diciembre, encuentro en el que la patronal también plantó a Trabajo.
