Los vascos han gastado un 7% más en Navidades pero con un ticket medio más bajo

Las operaciones en las que se sacó la tarjeta, el móvil o el reloj inteligente para pagar por parte de clientes de Kutxabank han subido un 9,9% estas Navidades frente al mismo periodo del año pasado. Tras cerrar este periodo festivo después del día de Reyes, esta vía se ha empleado en 5,8 millones de ocasiones hasta sumar un consumo total de 210,6 millones de euros, y arroja un incremento algo inferior (6,8%) al número de operaciones.

Casi la mitad de las veces que un vasco ha sacado la tarjeta para pagar –el 47,7%– ha sido para gastar en alimentación, y al que se dedicó entre finales de diciembre y la primera semana de enero un total de 100,8 millones de euros, un 9,5% más que en el año pasado y el epígrafe con un mayor importe en pagos. El segundo lugar en número de operaciones lo ocupa el consumo no relacionado con la alimentación, es decir, los regalos, que sube un 4,5%, así como el importe pagado en este sector (68,5 millones), con un alza del 3,4%.

Si atendemos ahora al ticket medio de compra en Navidades, se produce una curiosa paradoja en el consumo vasco. Mientras el importe total ha subido considerablemente (6,8%) respecto al mismo periodo vacacional del año pasado, cuatro de los cinco epígrafes del gasto medio en tarjetas que recoge Kutxabank registran descensos, siendo las 'gasolineras' y 'ocio/restaurantes' donde más baja el ticket medio, con un 1,7% y un 1,6%, respectivamente. Así, el desembolso en ocio y restaurantes ha pasado de los 22,5 euros de las Navidades pasadas a los 20,9 actuales. El importe medio en alimentación ha pasado de los 36,3 euros de 2023 a los 36,1 de 2024. La única partida que arroja un incremento es la de 'turismo/viajes', tras subir de los 37,9 euros a los 39,4. Expertos consultados por este periódico advierten de que esta situación puede deberse a que, a pesar de que el número de operaciones y los pagos han subido, el consumidor ha mirado más el bolsillo a la hora de hacer un desembolso, amén de una bajada de precios que se lleva produciendo desde inicios de año, lo que también ha provocado que el ticket medio arroje una curva descendente en prácticamente todos los sectores de actividad.

A la hora de analizar ese repunte entre las Navidades de 2023 y las de 2024 hay que tener siempre muy en cuenta el efecto de la inflación, que sin duda ha influido. El alza de los precios, que a lo largo del pasado ejercicio fue de más a menos (pero siempre en valores de crecimiento) habrá impulsado la cantidad total gastada, más si cabe aún en Euskadi, que registró el incremento más pronunciado del Estado tanto en el IPC general (3,6%) como en la cesta de la compra (3,6%).

El repunte de los alimentos en el tramo final de año tiene que ver con las progresivas retiradas de medidas que se pusieron en marcha para mitigar la escalada inflacionaria, relacionadas con el IVA de los alimentos. Muchas iban dirigidas a contener el encarecimiento de los alimentos y la electricidad, dos rúbricas que golpean de forma más incisiva los bolsillos de quienes menos ganan. Todo ello hace que la inflación de los precios en general, y de los alimentos en particular, haya acelerado en los últimos tres meses del año en Euskadi. Precisamente el epígrafe 'consumo en alimentación' es el que arroja un mayor crecimiento (9,5%) en el importe total gastado con tarjetas durante las Navidades, con 100,8 millones de euros, 8,7 más que en el mismo periodo del 2023.

Según Kutxabank, la representatividad de los datos de gasto con tarjetas es más que suficiente de lo que pueda ser el gasto total.Aún más habida cuenta de que poco a poco el plástico se impone como forma de pago.