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Una de cal y otra de arena. Esa es la fotografía que ofrecen los resultados correspondientes al primer trimestre del año en Euskaltel, que ... a pesar de marcar un nuevo récord de clientes y de anotarse un crecimiento interanual en los ingresos, ha entregado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) unas cuentas en las que en la última línea aparece (por primera vez desde que salió a Bolsa en 2015) un signo negativo. Unos números rojos que llegan en plena OPA amistosa lanzada por MásMóvil, que –salvo sorpresas– se hará este año con el 100% de la firma de Zamudio por un importe próximo a los 2.000 millones de euros.
La teleco naranja se ha apuntado unas pérdidas netas entre enero y marzo de 2,1 millones de euros, que contrastan con el beneficio de 19,1 millones del mismo trimestre de 2020. Tres son los argumentos que ofrece la firma pilotada por José Miguel García para justificar la caída primero del ebitda y después de los resultados globales, aunque la principal causa no es otra que la brutal pelea que vive el sector por retener a cada cliente.
Para hacerse una idea de esa terrible lucha entre los principales operadores baste decir que, al cierre del primer trimestre, el 75% de los clientes de Euskaltel estaba suscrito a algún programa de fidelización. Una práctica que a finales del pasado ejercicio, y en cierto modo alentada por los efectos de la pandemia, se disparó por completo.
Eso hizo que lo que se conoce en el negocio como ARPU (uno de los elementos más importantes para las telecos y que mide el ingreso medio por cliente) cayera sin remedio. En concreto, esa ratio, que hace un año marcaba 60,04 euros hoy se encuentra en 54,96, un 8,4% menos.
Tampoco han ayudado otros dos aspectos importantes. El primero, los costes asociados al lanzamiento y puesta en marcha de Virgin Telco, la filial con la que la empresa de Zamudio ha abordado el salto a todo España. Una marca que marcha muy bien y que suma ya 101.000 clientes (80.000 de fijo y 21 de móvil) y que genera 10,5 millones de ingresos al grupo.
Junto a esto, otro lastre añadido deviene del hecho de que, como consecuencia de la OPA, Euskaltel ha parado la tradicional renegociación de los acuerdos mayoristas, que se suelen hacer en el primer trimestre.
Más allá de eso, los números no son en absoluto malos. Euskaltel ha superado las cifras récord de los últimos trimestres, hasta superar los 847.000 clientes en el mercado masivo. En concreto, cuenta con 847.373, con un recimiento más que notable en el apartado de empresas, que ha cobrado últimamente una especial importancia, precisamente, por las necesidades causadas por la pandemia. De ese global, 737.000 clientes corresponden a la red fija, y 110.000 tienen contratadas únicamente telecomunicaciones móviles.
Los ingresos del grupo crecieron un 1,4% respecto al ejercicio anterior, hasta alcanzar los 174,2 millones de euros. Sin embargo, el margen bruto fue inferior (114,7 millones frente a 125 en 2020).
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