LAB no tendrá que aplicar retenciones por las ayudas de la caja de resistencia

LAB pondrá su 'Caja de Lucha' al servicio del nuevo ciclo de movilizaciones, tras resolver la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que la legislación que las diputaciones pretendían «imponer» a la central sindical «no es aplicable porque la relación en la que se basa es sindical». Así la central no tendrá que aplicar retenciones por los pagos realizados a través de este instrumento que desde su creación en 2011 «ha brindado protección a casi 3.000 trabajadores».

En febrero de 2018 la Diputación de Bizkaia envió a diferentes sindicatos un requerimiento sobre sus cajas de resistencia y el resto de diputaciones siguieron la misma línea. Según la central dirigida por Garbiñe Aranburu, tras el requerimiento «se ocultaba la intención de extender la sospecha de que los sindicatos no pagábamos los impuestos correspondientes».

LAB se opuso con dos argumentos: que la ayuda no podía ser considerada como rendimiento de trabajo y que aunque se considerara como tal, no se le podía aplicar una retención del 2%, ya que la relación entre el sindicato y su afiliación no es laboral sino sindical.

La Diputación de Álava no abrió finalmente ningún expediente, la de Bizkaia lo abrió pero después tomó en consideración las alegaciones de LAB, y la de Gipuzkoa no las atendió y el sindicato acudió al juzgado. Ahora, el TSJPV ha dado la razón a LAB.

La 'Caja de Lucha' de esta central da cobertura a multas y fianzas hasta 10.000 euros; asesoría y costas en procesos penales; sanciones impuestas por las empresas y despidos «ideológicos», de forma que el trabajador contará hasta el juicio con su cobertura en las mismas condiciones en las que recibiría estando en huelga, de manera que a partir del tercer día se percibirán 30 euros diarios (900 mensuales), aunque el salario neto y la suma mensual de la Caja no podrá superar el salario ordinario ni los 1.500 euros.

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