Erik Jaka tiene pericarditis y no jugará el Manomanista
Los médicos estiman un periodo de recuperación próximo a dos meses, por lo que el campeón se pierde el Manomanista
Dos noticias en una. La mala. Erik Jaka sufre una pericarditis que le mantiene todavía hospitalizado en la Clínica IMQ Zorrotzaurre de Bilbao y ... le impedirá defender la txapela en el Manomanista. La buena. La dolencia no es grave y el delantero de Lizartza podrá retomar la actividad con absoluta normalidad al final de un periodo de recuperación que sus cardiólogos estiman «entre cuatro y ocho semanas».
Los resultados de los exámenes médicos a los que Jaka se ha sometido desde la tarde del domingo revelan la existencia de una pericarditis. El de Lizartza ya ha iniciado el tratamiento, que se hace a través de aspirinas en este tipo de dolencias, víricas la mayoría de las veces. Fuentes médicas consultadas apuntan que «solo cuando la recuperación no es la adecuada se recurre a los corticoides». Ayer seguía ingresado y, según la nota publicada por Baiko, es probable que reciba el alta hospitalaria a lo largo del día de este miércoles.
Jaka llegó al servicio de urgencias de la clínica Zorrotzaurre tras sentir dolor en el tórax durante el partido de su estreno como pelotari de Baiko en el Bizkaia de Bilbao. Notó también dificultades a la hora de respirar, así como un mareo cuando se retiró al interior del vestuario. Los doctores Iñigo Simón y José María Urrutia, los primeros en atenderle, decidieron evacuarle en ambulancia a un centro hospitalario de la capital vizcaína. Desde su llegada comenzaron a realizarle pruebas que continuaron a lo largo del lunes.
Los dolores iniciales han remitido con el paso de las horas y el estado de Erik Jaka ha mejorado de forma progresiva tras el susto inicial. En principio, una vez reciba el alta, podrá llevar a cabo su vida con normalidad, salvo en el aspecto deportivo. Necesitará entre cerca de dos meses para regresar a los entrenamientos y desde instancias médicas señalan que «seguramente requerirá someterse a nuevas pruebas antes de retomar la preparación con vistas a su vuelta a las canchas».
La baja de Jaka obliga a Baiko y Aspe a reorganizar la composición del Manomanista. Así, la empresa bilbaína repesca a Axier Arteaga con el fin de completar su nómina de seis representantes en la competición. El lasartearra cayó 22-2 ante Artola el pasado viernes en Zalla dentro de una previa que ha quedado sin ningún valor por la obligada ausencia de última hora del campeón.
Las empresas respetan así el cupo de seis pelotaris del que dispone cada una. Aspe tenía en la recámara a Peio Etxeberria, sacrificado por la presencia de Zabaleta y Rezusta en la lista de una Aspe que no ha podido montar ninguna previa porque el de Etxarren disputó el domingo la final del Parejas y la cesión del zurdo de Bergara a Baiko concluyó ese mismo día. No podrá ser.
Soluciones adoptadas por la Liga de Empresas de Pelota a Mano (LEP.M) en situaciones similares conducen a pensar que Mikel Urrutikoetxea será el pelotari elegido para ocupar la plaza de cabeza de serie que correspondía a Jaka como campeón de 2020. Aunque Ezkurdia fue en la pasada edición el eliminado de cuartos que sumó mayor número de tantos, prevalece el criterio de pertenencia a la misma empresa del pelotari que causa baja, tal y como ha ocurrido en casos similares. No cambiará el orden de los cabezas de serie para los cruces de semifinales. La rama del sustituto de Jaka se cruzará con la de Elezkano II (4º el año pasado) y la de Altuna III (2º) con la de Darío (3º).
El futbolista Carvajal, caso reciente en el deporte de élite
Dani Carvajal, defensa del Real Madrid, permaneció de baja en 2017 por culpa de una pericarditis, la misma dolencia detectada a Jaka. «Las primeras tres semanas fue lo más duro», declaró en su día. «No me dejaban hacer casi nada, no podía subir pulsaciones y me aburría muchísimo». Volvió a jugar con absoluta normalidad.
La pericarditis es la hinchazón e irritación del tejido delgado en forma de saco que rodea el corazón. «El pericardio es como una sábana que recubre el corazón», apuntan desde fuentes médicas. «Cuando se inflama provoca dolor y a veces fiebre. En el peor de los casos, algún derrame. El diagnóstico se confunde a veces con la angina de pecho, pero la pericarditis no es grave».
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