La cantera de Tolosaldea, a la cabeza

Tolosaldea dispone de una estructura peculiar en comparación con otras comarcas del territorio ya que está constituida por un núcleo principal de casi 20.000 habitantes, Tolosa, rodeado de pueblos pequeños de los que solo Villabona supera los 3.000. Curiosamente, esas localidades de menor tamaño son la principal cantera para los clubes de pelota.

Únicamente Jon Ander Peña es de Tolosa. De pueblos de menos de 1.000 habitantes proceden el amezketarra Altuna III, el lizartzarra Erik Jaka y el ikaztegietarra Beñat Urretabizkaia. Entre 1.000 y 2.000 tienen Alegia, localidad de Iñaki Artola, y Anoeta, la de Xabi Tolosa. Roza los 3.000 Zizurkil, donde reside Jon Erasun. Entre estas seis localidades no suman ni la mitad de la población de la 'capital' Tolosa.

Los siete profesionales de Tolosaldea se han formado o han pasado por la disciplina de dos clubes, el Zazpi Iturri de Amezketa y el Aurrera Saiaz de Tolosa. Apoyados en la calidad de sus jóvenes, uno y otro han despuntado durante muchos años en las competiciones más importantes del campo aficionado.

Luis Galarraga, responsable en su día del Aurrera Saiaz, apunta que «yo no diría que existía una competencia directa entre los dos equipos, pero ambos ofrecían a los pelotaris la posibilidad de mejorar porque reunían grupos de entrenamiento atractivos».

Xalton Zabala, referente del Zazpi Iturri, señala que «tanto Aurrera Saiaz como nosotros nos hemos nutrido sobre todo de los pueblos pequeños. El frontón ha sido el lugar al que más acudían los niños y la pelota formaba parte de sus juegos».

Zabala, quien a sus 69 años ha puesto punto final a su trayectoria al frente del Zazpi Iturri -«iniciada en 1975 cuando tenía 25», confiesa-, ha observado en los últimos tiempos un cambio que afecta a los clubes. «Antes, cada niño estudiaba hasta los 14 años en su pueblo. En la actualidad, con 11 o 12 todos se marchan a Alegia o a Tolosa, donde encuentran una oferta deportiva amplia. Además, pasan mucho tiempo fuera de sus localidades, disponen de mejor transporte público... Resulta complicado hacer frente a eso. Alegia, Altzo e Ikaztegieta, por ejemplo, se han unido en una misma escuela de pelota».

Luis Galarraga no concede tanta importancia a esta coyuntura: «En Tolosa siempre han existido otros deportes que atraían a los jóvenes, empezando por el fútbol. Concedo mayor importancia a otra cuestión. En los pueblos pequeños existía más ambiente de pelota. Un chaval de 14 años iba al frontón y se encontraba con otros de 18 o 20 con quienes poder jugar. Eso supone un incentivo y creo que lo estamos perdiendo».

El propio Galarraga relativiza los éxitos de su cantera. «Estoy convencido de que Reyes Azkoitia, por ejemplo, enseñaba a jugar a pelota en Bergara tan bien o mejor que nosotros. Y lo mismo en otros lugares. Todos hemos metido muchas horas del frontón. Todos. Lo que sí es importante es el número de chavales. Si tienes muchos, es más fácil que salgan buenos. Y aparte de eso, satisface que jueguen a pelota».

Ambos, Xalton Zabala y Luis Galarraga, muestran su preocupación «por el descenso del número de licencias. De hecho, muchos pueblos han desaparecido de competiciones como los campeonatos de Gipuzkoa en sus distintas categorías. Y esa reducción también se nota en torneos de edades tempranas». Esa tendencia negativa se ha trasladado, asimismo, al Interpueblos de mano, víctima de un descenso reseñable en la participación en las últimas ediciones.

La juventud es el denominador común de los siete pelotaris de Tolosaldea que militan actualmente en las filas de Aspe y Baiko. Beñat Urretabizkaia, de 27 años, es el mayor de este grupo, seguido de Jaka, con 26, e Iñaki Artola, con 25. Xabier Tolosa y Jokin Altuna cuentan con 24, Jon Erasun tiene 23 y Jon Ander Peña es el benjamín con 22.

Forman parte de una hornada que ha conseguido un protagonismo innegable en la máxima categoría, además a temprana edad. Altuna III ha sido campeón del Manomanista y del Cuatro y Medio. El amezketarra ganó la última final del Torneo San Fermín de la jaula precisamente a Artola. Otro que se codea entre los grandes es Jaka, mientras que Peña II obtuvo hace unos meses el título Promoción del cuatro y medio.

La buena salud de la pelota en Tolosaldea contrasta con la nula presencia de las comarcas de Bidasoa-Txingudi y Debabarrena (Bajo Deba), donde está situado el Astelena de Eibar, frontón de referencia. También ha perdido presencia en las últimas décadas Debagoiena (Alto Deba), cuna de campeones y con una plaza de larga historia como Bergara.

Destaca asimismo que Azpeitia es la única localidad guipuzcoana con dos profesionales de la mano, Jon Alberdi y Julen Egiguren, cosecha de la labor impagable realizada por el club Ilunbe. Sin embargo, Azkoitia, referencia en Urola-Kosta durante mucho tiempo, lleva años de sequía.