Baiko lleva dos meses sin ganar a Aspe en Primera
La empresa bilbaína ha encadenado diez derrotas consecutivas entre el Parejas y el Manomanista | La antigua Asegarce se queda con cuatro pelotaris en la competición reina, mientras que Aspe conserva a ocho
Hay que remontarse dos meses y ocho días para encontrar la última victoria de representantes de Baiko frente a los de Aspe en ... una competición oficial de Primera. Sucedió el 16 de febrero en Soria. En la penúltima jornada de la primera fase del Campeonato de Parejas, Víctor y Albisu sorprendieron 17-22 a Elezkano II y Rezusta, quienes semanas después se calaron las txapelas en el Bizkaia de Bilbao.
Desde entonces, los pelotaris de Aspe suman diez victorias consecutivas frente a los de Baiko, ocho en el Campeonato de Parejas y dos en el Manomanista. Existe otra estadística contundente que pone en valor a un pelotari veterano. Desde que Aimar Olaizola permanece en el dique seco, Aspe ha ganado doce de los trece duelos directos entre las dos empresas.
Algún resultado positivo en categoría Promoción es poco consuelo ante semejante superioridad, reflejada también en el reparto de títulos. La promotora de Eibar se ha impuesto en los cinco últimos grandes torneos: el Cuatro y Medio de 2017 (Altuna III), los tres de 2018 (Ezkurdia-Zabaleta en el Parejas, Altuna III en el Manomanista y Ezkurdia en el Cuatro y Medio) más el Parejas de 2019 (Elezkano II-Rezusta). Para colmo, los discípulos de Jokin Etxaniz han copado las dos finales más recientes.
La falta de victorias eleva la preocupación en el seno de Baiko. Su gerente deportivo Unai Iglesias lo reconoce, aunque espera que «sea solo una racha. De todas maneras, debemos analizar lo que está sucediendo. Venimos de un Campeonato de Parejas en el que los resultados no han sido los deseados».
El comienzo del Manomanista, con derrotas amplias de Agirre contra Peio Etxeberria (6-22) y de Laso ante Julen Retegi (22-8), ha acentuado la sensación de debilidad. «Veremos cómo se desarrolla el Manomanista», apunta Iglesias. «Cuando concluya, será el momento de analizar todo el año. Esperamos que pelotaris como Urrutikoetxea y Bengoetxea VI nos den una alegría».
Presión y más presión
La ausencia de triunfos aumenta la presión sobre la plantilla y los técnicos de Baiko, mientras que ejerce justo el efecto contrario sobre los de Aspe. Hay que gestionarla. De hecho, de los doce pelotaris que siguen en competición en el presente Manomanista ocho pertenecen a la disciplina de la empresa de Eibar y cuatro, la mitad, a la de la promotora bilbaína. Iñaki Artola, rival de Jaka el viernes en Tolosa, Bengoetxea VI, que espera a Julen Retegi el sábado en Pamplona, y Víctor, oponente de Irribarria el domingo en Eibar, están obligados a vencer para mantener una representación paritaria en cuartos de final. Si cae uno de los tres, quedarán en minoría.
El mayor de los cuatro eliminados tiene 23 años
La juventud de las plantillas de las dos grandes empresas de mano depara datos curiosos que conviene no pasar por alto. Baiko ha visto cómo perdía a las primeras de cambio a los cuatro pelotaris más jóvenes que ha presentado en la parrilla de salida del Manomanista. Asier Agirre es el mayor de ellos con 23 años. Le siguen Axier Arteaga y Joanes Bakaikoa con 22. Unai Laso es el benjamín con 21. Entre sus 'verdugos' solo hay uno más joven que ese cuarteto, Pello Etxeberria con 20.
La apuesta por la juventud se está llevando a extremos que requieren dosis de paciencia para no resultar contraproducentes. Porque no todos emergen con la rapidez de un Iker Irribarria o de un Jokin Altuna, ejemplos de precocidad.
El responsable de la promotora vizcaína considera que «las lesiones nos han perjudicado. Habíamos depositado esperanzas en Laso, pero la lesión y la falta de continuidad le han perjudicado. Agirre tampoco tenía curadas del todo las manos».
Estos inconvenientes se unen a lesiones de larga duración como la sufrida por Aimar Olaizola a primeros de febrero, que trastocó por completo los planteamientos de una empresa que había puesto buena parte de sus esperanzas en la potente pareja formada por el de Goizueta y Albisu. «Ahora se suma también la lesión de Jon Ander Peña, que permanecerá alejado de las canchas durante un buen tiempo», lamenta Iglesias.
Dirigir la mirada a la cantera es la solución más socorrida en estos casos. «Tenemos en la recámara a jóvenes como el delantero riojano Lerena y el zaguero vizcaíno Uriondo, que se entrenan con nosotros. No pensamos en ellos a corto plazo. Antes de tomar decisiones, debemos estudiar cómo está la plantilla con vistas al verano. Veremos entonces si necesitamos refuerzos».
Otro de los recursos a los que han recurrido tanto Aspe como en su día Asegarce es la incorporación de manistas de la empresa rival a través de contrataciones o cesiones puntuales. Unai Iglesias descarta esa opción. Al menos, de momento. «En principio no nos planteamos ir a por pelotaris de Aspe».
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