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Los momentos posteriores al encuentro de las semifinales de la Supercopa de España que disputaron el Real Madrid y el Mallorca fueron de mucha tensión, tanto en el campo y en los vestuarios, por las diversas tanganas de los jugadores, como fuera, a la salida de algunos de familiares del cuadro bermellón. De hecho, Cristina Palavra, mujer del mallorquinista Dani Rodríguez, denuncia el haberse sentido acosada por varios aficionados saudíes junto a Natalia Kaluzova, mujer de Diminik Greif, que va más allá y habla de «insultos en árabe, empujones y agresiones».
«La verdad es que la salida ha sido complicada», relata Palavra a la cadena Esports IB3. «Hemos ido con los niños, hemos estado sin seguridad y los chicos de aquí, de este país, se han puesto a hacernos fotos de cerca, nos han estado acosando», sostiene. Junto a ella, estaban Natalia y Natalia, mujer de Greif: «La niña estaba dormida, estábamos con los niños y nos hemos visto un poco desubicados porque no teníamos a nadie protegiéndonos», significa.
🤬"Ens han assetjat"
— Esports IB3 (@EsportsIB3) January 9, 2025
🗣️Cristina Palavra, dona de Dani Rodríguez, parla de la desagradable situació que han viscut els familiars dels jugadors del Mallorca durant el partit. pic.twitter.com/Ecgll6NoF6
El relato de Natalia Kaluzova, esposa del portero Greif, todavía es más grave: «Un grupo de personas vino hacia nosotros, nos hicieron vídeos, nos insultaron en árabe, nos grabaron sin consentimiento y hubo agresiones», denuncia.
Cuando entraron en el bus se acabó su pesadilla e intentaron hablar con sus maridos, los jugadores, aunque fue imposible porque no tenían cobertura. Estaban también ávidas de conocer qué había pasado en sus refriegas con los futbolistas del Real Madrid: «La que se ha liado ahí abajo ha sido tremendo, pero espero que esté bien porque las malas noticias vuelan», dice Cristina.
Estas vivencias se enmarcan dentro de la crítica generalizada a la disputa de la Supercopa de España en un país como Arabia Saudí, lejos de las aficiones de los cuatro equipos participantes y donde no se respetan algunos derechos humanos básicos, principalmente de las mujeres. Además, se sigue practicando la tortura y maltrato a presos que no han sido juzgados y castigos corporales por el llamado 'desvío sexual' o la embriaguez.
En septiembre de 2019, la RFEF firmó un contrato con Sela Sport, la empresa pública de Arabia Saudí encargada de la organización de eventos deportivos, para llevar a ese país la Supercopa de España durante los seis siguientes años, un contrato que puede ampliarse hasta 2029. El virtud del acuerdo, el ente federativo ingresa 40 millones por cada edición de la Supercopa que se dispute en el país saudí, pero hay existe un matiz diabólico. La RFEF ingresa cinco millones menos (35) si no la juegan el Barça o el Madrid y 10 menos si no la disputa ninguno de los dos, algo improbable. Así las cosas, a la Federación le conviene económicamente que los dos grandes queden los dos primeros de la Liga y, si no es así, por lo menos lleguen a la final de Copa, con el fin de que puedan disputar esa Supercopa con formato de 'final four'.
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