Eneko Agirrezabal: Profesor, presidente y atleta con ganas de Arzak
El maratoniano del Txindoki, un currante del atletismo, invitará a sus padres al prestigioso restaurante donostiarra
«Medio en broma les dije a mis padres que si ganaba les invitaría a comer al Arzak y ahora me toca cumplir», aseguraba Eneko ... Agirrezabal, flamante ganador de la Behobia-San Sebastián, minutos después de vivir uno de los momentos deportivos más bonitos de su larga carrera. «Aunque iremos otro día porque ahora estoy muerto».
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El segurarra del Txindoki, a los 35 años, disfrutó de lo lindo -aunque también sufrió- del calor del público. Es un currante del atletismo. Pista, cross, ruta. Da igual lo que le pongan porque siempre responde bien. Ahora prepara maratones, muchas veces entrenando en solitario durante kilómetros y kilómetros. «Espero estar en 2h12 en Valencia en tres semanas». También ha sufrido con las lesiones. Los últimos problemas, «en el Aquiles», le tuvieron hasta el sábado con la duda de si correría o no esta Behobia. Y menos mal que en la última sesión previa se encontró bien. «Esta semana ha sido un corro, no corro, corro, no corro...». Y ya tiene la txapela en casa.
Este lunes, cuando llegue al colegio en el que trabaja -es profesor de secundaria e imparte Física y Química- seguro que le reciben con un gran aplauso. Como en Segura y en su club, el Txindoki, en el que además de ser un embajador perfecto, es el presidente.
La Behobia es grande por victorias como las de Eneko, el primer guipuzcoano -con permiso de Chakib Lachgar, marroquí residente ahora en Irun- en 27 años que triunfa. Es un fondista total, un currante. Un fuerte aplauso para él. Y también para su familia, que siempre le ha apoyado en este camino atlético. Brillante victoria en el Boulevard. Bravo, Eneko.
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