El rosa opaco es el nuevo color del cine fantástico queer
Los filmes de Jane Schoenbrun se vuelven cine de culto desde su estreno. Con 'I Saw the TV Glow' pasó en Sundance, Berlín y Tabakalera
A24 produce esta pieza, una propuesta de Zabaltegi que reventó las salas de TBK y el Trueba y hoy, seguro, arrasará en su proyección final ... del Príncipe 10. El nombre de la productora es de suma importancia, A24 simboliza la osadía, el baile feliz sobre el filo, muy afilado, de la navaja. A24 Films ha llevado a la pantalla 'Todo al mismo tiempo en todas partes', 'Maxxxine', 'Sangre en los labios'.
Jane Schoenbrun, persona no binaria que coloquió con los alumnos de las escuelas cinematográficas de medio mundo reunidos en Nest, tiene solo dos largometrajes. Transgéneros total. Entre el terror y lo queer. Su primera obra fue 'Ver We're All Going to the World's Fair', sobre una adolescente atrapada en un juego 'creepypasta' de horror on line. Compitió con honores por unos premios cuyo nombre, ahora que esperamos la llegada, del Joker y Lady Gaga, es altamente significativo, los Gotham Awards.
Cuando presenta su segunda entrega, este 'I Saw the tv Glow', Jane reconoce influencias y admiración suprema por títulos cuya huella descubre en el filme cualquier aficionado al celuloide no normativo, trans trans, trans género: 'Donnie Darko', 'Twin Peaks', 'Expediente X', 'Buffy' o los primeros trabajos de Nolan y Aronofsky. Admite también que se trata de una 'carta de amor' a los críos y las crías trans de los 90 que no tenían nada claro qué sentían ni cómo ni, sin referencias, por qué.
'I Saw the Tv Glow' comienza con un/a/e adolescente enterrado en vida. Continúa inmediatamente con unas imágenes tan tan tan trabajadas que, casi fosforescentes parecen pintadas sobre el asfalto o el celuloide. Es la historia de dos criaturas marginales, embrujadas por una serie de tv de horror juvenil titulada 'Pink Opaque'. Al tiempo la serie, a la que ya adultos le encontrarán todos los defectos que antes ni sospechaban, es cancelada. Abruptamente. Colgados. Literalmente se quedan colgados. Para siempre. Eran más felices en aquellos episodios, que en el mundo real. En 'Pink Opaque' se diría que todo fuera trans. Aunque en aquella su adolescencia y aquel su lugar de residencia nadie supiera lo que significaba 'trans'. Ni 'queer/cuir/kuir'.
El rosa opaco es el nuevo color del kuir. Y 'El brillo de la televisión', su película. Su película desconcertante, ambiciosa. Jane acepta que le costó reconocerse trans porque 'mi disforia era muy oblicua', una experienca muy interna, nada que ver con lo que cuentan filmes tipo 'siempre supe que era una chica'. 'Quiero hacer películas para mi gente', asegura. Que somos unos cuantos/as/es.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
