Borrar
María Rozalén, en una entrevista reciente realizada en Ciudad de México. ÁLEX CRUZ/EFE
Rozalén | 'El árbol y el bosque'

«El mundo se vuelca con los ucranianos mientras siguen dando palos a los africanos en Melilla»

Rozalén actuará el sábado en un Kursaal lleno para presentar su cuarto disco, 'El árbol y el bosque', donde se atreve con la cumbia, la ranchera y el disco-funk

Carlos Rodríguez Vidondo

San Sebastián

Miércoles, 30 de marzo 2022, 06:51

Comenta

María Rozalén (Albacete, 1986) está en todos los lugares. Tan pronto colabora con Izaro en su 'Limones de Oro' como con el gaitero gallego Carlos Núñez; se solidariza con el Sáhara, como canta para los niños víctimas de la invasión en Ucrania. Sus dos últimos años han estado marcados por la pandemia y el reciente fallecimiento de su padre, pero también por un premio Goya a la mejor canción original (por 'Que no, que no', de la película 'La boda de Rosa' de Iciar Bollaín), el Premio Nacional de las Músicas Actuales 2021 y el Premio Estatal de Trabajo Social. «Todo esto me abruma porque son muchos y muy gordos... ¡Me siento una recién llegada! Por si fuera poco, el sábado aterrizará en el Kursaal a las 20.30 horas para presentar 'El árbol y el bosque' (2020, Sony Music), su cuarto álbum de estudio.

– Antes de la pandemia ya había recorrido desde Miami hasta la Patagonia... No para.

– Ya he trabajado en algunos países, pero es muy grande y, por ejemplo, a Puerto Rico y Ecuador es la primera vez que he ido. Hay mucho para sembrar y cada vez la familia es más grande.

– Es curioso que, mientras las bandas de aquí intentan ganarse un público en lugares más concretos como México o Argentina, usted se mueve por todo el continente.

– Lo importante es llegar a la mayoría de sitios, qué más me da que haya cien personas o tres mil. Además me sienta muy bien porque, aunque empezar allí de cero sea duro, me pone los pies en la tierra y me motiva. Me doy cuenta de que tengo todo por hacer, porque España es un país muy chiquitico comparado con Latinoamérica. Y a mí de pequeña me encantaba soñar con poder dedicarme a algo que me permitiera viajar, porque es bueno para la cabeza y para el alma.

– Y bueno para la música también. En este álbum se ha empapado de cumbia, ranchera norteña, son cubano, disco-funk...

– Hay de todo, desde el primer disco cada canción es diferente. Nos hemos acostumbrado al eclecticismo, a jugar cada vez más y así seguirá siendo. En cada viaje que hemos hecho por Latinoamérica hemos contado con especialistas de allí. Pero también hay influencias más británicas como en 'Y busqué'.

– Estudió psicología, así que sabe bien lo que es bueno para la cabeza. De hecho, en 'Que no, que no' canta sobre la asertividad...

– Aprender a decir que no es muy, muy difícil. ¡Yo no lo consigo! Lo trabajo pero parece que no hay manera (ríe).

Colaboraciones

«Lo más guay que me está pasando es que estoy cantando con Ska-P y al día siguiente con Drexler, eso no le pasa a mucha gente»

– ... y sobre el autocuidado, cuando dice: «Si quiero mejorar el mundo, primero voy a mimarme yo».

– Se ve muy claro con el ejemplo ese que se da en los aviones: primero te pones tu mascarilla para poder ponérsela a los demás. 'Nadie da lo que no tiene', que es una frase que me decía mucho mi padre. Como no descanses y le dediques atención al cuerpo, se hace todo cuesta arriba y no puedes ofrecer tiempo de calidad a los demás.

– Precisamente su padre era una de las raíces que sostenían ese 'bosque'.

– Sigo con un shock brutal... Porque soy mi padre en millones de cosas, por ejemplo, en la hipersensibilidad. Y es que soy hija de sacerdote. Él siempre ha verbalizado mucho sus emociones, el amor por el prójimo... Me decía: 'acuérdate siempre de dónde vienes y de que tus abuelos fueron humildes'. Ahora que se me ha ido le lloro mis horitas al día, aunque el trabajo me está viniendo muy bien porque así no pienso tanto. Y como psicóloga sé que esto es un proceso largo y tengo la mezcla de una pena tremenda en el corazón y, al mismo tiempo, aprecio más la vida. Tendré que aprender con este contraste pero cantar me viene bien y a él le gustaban las canciones más reivindicativas.

EL CONCIERTO

  • Lugar Auditorio Kursaal.

  • Día y hora Sábado, a las 20.30 horas.

  • Precio 60 euros.

– Pues de esas hay muchas en su repertorio y 'La línea' es más actual que nunca. Canta sobre el drama de la migración y la frialdad de las fronteras.

– Este tema sentía que tenía que salir desde hace mucho tiempo. Antes de la pandemia yo venía de un campo de refugiados en Chad, en el corazón de tantas historias que acaban muriendo en el Mediterráneo. Ahora que estamos tan orgullosos de cómo el mundo se vuelca con los ucranianos, es muy bestia cómo, esa misma semana, estaban dando palos a los africanos en Melilla. Ahí comprendes cómo somos las personas y el fondo de todo. Esa canción habla de las realidades que me ha tocado, por suerte, conocer.

Reconocimiento

«Mi padre paseó el Goya por todo el edificio, fue un premio que provocó una alegría enorme a todos los que me quieren»

– Hace poco publicó una foto con una camiseta de la Asociación de Apoyo al Pueblo Saharaui de Euskadi, en la que puede leerse en euskera 'Saharar herria askatu'.

– Había gente que me decía que si acaso estaba comparando el País Vasco con el Sáhara (ríe), pero no tiene nada que ver. La camiseta es de la Asociación y me encanta.

– ¿Por qué cree que el Gobierno dio este paso? ¿Y por qué ahora?

– Para llevarse bien con Marruecos. Estoy leyendo mucho sobre esto y creo que todos intuimos qué puede haber detrás, pero ¿a costa de qué? Estuve en los campamentos saharauis y me dieron absolutamente todo. Venía de una gira en la que dormía en hotelazos y, de repente, me vi allí sin luz ni agua, bajo las estrellas y fui tremendamente feliz a pesar del dolor. Tengo especial sensibilidad con este pueblo porque son mis hermanos y por encima de todo está lo humano. Aunque ya vemos que no es así.

– Lo político-social en la música de autor se etiqueta como 'canción protesta' y, aunque la suya no sea así, también alza la voz. Y eso se le ha reconocido ahora con el Premio Estatal de Trabajo Social.

– Últimamente esto de los premios me abruma porque han sido muchos y muy gordos. Este me ha hecho especial ilusión porque vengo de la psicología social y me lo tomo como una señal de que sigo por el buen camino. Pero si en algún momento me apetece hacer algo que no sea tan profundo, lo haré. Aunque lo dudo.

Público latinoamericano

«Lo importante es llegar a la mayoría de sitios, qué más me da que haya cien personas o tres mil. Me pone los pies en la tierra»

– Escoja entre el del Ministerio de Cultura, el Nacional de las Músicas Actuales o el Goya.

– No puedo elegir... Lo que pasa es que como el Goya tiene un cabezón y se hace ver, a la gente le hace una ilusión tremenda cuando viene a mi casa. Se hacen fotos, se graban haciendo un discurso... Mi padre lo paseó por todo el edificio y provocó una alegría enorme a todos los que me quieren. Pero el que me dio el Ministerio de Cultura... pues imagínate. Soy la más joven a la que se lo han dado y digo, ¿pero qué he hecho yo? Me siento como una recién llegada y aún tengo mucho que hacer.

– Ya le quedan pocos músicos con los que colaborar... En 2019 fue la artista femenina más reclamada en los festivales.

– Lo más guay que me está pasando es que estoy cantando con Ska-P y al día siguiente con Drexler (ríe). Y eso es algo que no quiero perder, porque la gente sabe que tengo mucho aprecio por la música sin etiquetas ni prejuicios. Que me abracen de estilos tan diferentes sí que es un premio y no le ha pasado a mucha gente. Además, conmigo todo es fácil y divertido.

Duelo por su padre

«Como psicóloga sé que es un proceso largo y tengo la mezcla entre pena y, al mismo tiempo, mayor aprecio por la vida»

– Aquí ha dejado buenos amigos como Izaro, con quien ahora a regrabado 'Mi canción para Elisa' para su nuevo disco.

– Es una preciosidad de canción, es de mis favoritas y a ella la admiro muchísimo. Pero también a Olatz (Salvador), que me ha puesto a cantar en euskera; o a Zea Mays, con quienes canté en la inauguración del pasado Festival de San Sebastián cantando 'Negua joan da ta'. Me están abrazando muy fuerte mis compañeras vascas y estoy súper agradecida.

– 'El árbol y el bosque' es el título que ha escogido por algo en relación con Luis Eduardo Aute.

– Antes de morir, Aute dijo en un documental el título que iba a llevar su nuevo disco. Luego se nos marchó y, tras ver el documental, hablé con su hijo porque quería hacerle un homenaje con aquel título, aunque al final no usé ese sino 'El árbol y el bosque'. Me parece muy bonito hablar de nosotros como un árbol que debemos cuidar, dentro de un bosque repleto de ruido y velocidad que nos impide hacerlo. Pero sí, sobre todo es un guiño hacia alguien que ha sido un faro y uno de mis preferidísimos.

De Ecuador al Kursaal sin transbordos y con sorpresas en la maleta

Rozalén aterrizará el sábado en el auditorio Kursaal, casi, de forma literal. «Caigo desde el avión de vuelta de Ecuador», dice, y es que lleva allí una semana haciendo una visita sobre el terreno con la ONG Entreculturas, a donde llegó desde Puerto Rico, tras una primera toma de contacto para una colaboración musical que no puede desvelar. La cantautora sigue cultivando a su público al otro lado del charco y manteniendo ese compromiso con cualquier causa solidaria que se le presenta. Ahora de regreso en Donostia (que tantas veces le ha acogido) y, sin querer dar más detalles, adelanta que este sábado ofrecerá alguna sorpresa. Puede que en euskera. «Algo pasará, ¿quizá a capella...? ¡Estoy hablando de más! Ya lo veremos», contesta entre dientes. «Me encanta 'Txoria txori', por supuesto».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco «El mundo se vuelca con los ucranianos mientras siguen dando palos a los africanos en Melilla»

Rozalén | 'El árbol y el bosque': «El mundo se vuelca con los ucranianos mientras siguen dando palos a los africanos en Melilla»