Donostia acoge el concurso internacional que busca nuevos talentos para la lírica

Se trata de uno de los pocos concursos que no tiene límite de edad, tal y como destaca la directora de Opus Lirica, Ainhoa Garmendia. «Normalmente un concurso de canto suele tener un límite de edad en 30-32 años y hemos considerado que hay cantantes buenísimos que superan esa edad y que están por descubrir y merecen que se les de una oportunidad». Otra de las especificidades de este certamen es que los premios no son monetarios, sino contratos que ofrece tanto Opus Lirica como sus colaboradores, teatros europeos o agentes que ejercen de jurado.

El concurso se desarrolla por fases. Durante los dos primeros días, los próximos martes y miércoles, serán las eliminatorias en la iglesia de Zorroaga, con entrada libre para el público que quiera asistir. Los seleccionados, «el número dependerá de la calidad», explica Garmendia, pasarán a las semifinales, que se disputarán los días 11 y 12 también en Zorroaga.

De ahí saldrán los finalistas, un máximo de 20 intérpretes, que el sábado 13 cantarán en el Teatro Victoria Eugenia, escenario que acogerá por primera vez la gran final. «Será un gran espectáculo, con cantantes de diferentes nacionalidades que interpretarán un aria de ópera o una romanza de zarzuela, acompañados por Pedro José Rodríguez al piano. Para los interpretes también será emocionante poder cantar en un escenacio tan imponente como el Victoria Eugenia».

Un total de 52 intérpretes de 16 nacionalidades se han inscrito en esta tercera edición del concurso, «prácticamente vienen de todo el mundo, desde China, Corea, Nueva Zelanda, México, Argentina y muchos países de Europa», confirma la directora de Opus Lirica. Sin embargo, al contrario que en años anteriores, en esta ocasión no habrá representantes vascos.

Profesionales de reconocido prestigio en el ámbito de la lírica ejercerán de jurados. En la fase eliminatoria estarán la soprano y profesora de canto Ana Nebot, el director y correpetidor Rodrigo de Vera, y la soprano y directora artística Ainhoa Garmendia. Después de cada sesión se juntarán con todos los participantes en un encuentro en el que analizarán con ellos lo visto durante la audición. «Les damos algunas pautas para que ellos puedan mejorar en otras audiciones, es algo que ellos agradecen mucho».

El jurado de la gran final lo formarán Rebekah Rota, Intendente de Oper Wuppertal (Alemania); Björn Peters, Director artístico de Semperoper, de Dresden; Damià Carbonell, director artístico de la Opera Nacional de Holanda; y el agente artístico inglés Christopher Carroll. «Todos ellos elegirán a uno o dos participantes, lo que estimen oportuno, a quines les ofrecerán un contrato en alguna representación», aclara Garmendia. Este año también habrá un premio del público, que lo elegirán los asistentes al recital de la final.