La bola de Studio 54 volverá a girar
El Brooklyn Museum prepara una muestra sobre la discoteca que dio alas a la 'celebrity culture', liderada por Warhol
El Brooklyn Museum de Nueva York tiene previsto acoger, cuando pase la pandemia, la exposición sobre Studio 54, la discoteca neoyorquina que en los años setenta y ochenta se convirtió en la cúspide de la fama mundial y en un hábitat promiscuo y propicio al descontrol. Fundada por Steve Rubell e Ian Schrager, que se conocieron mientras estudiaban Finanzas en la universidad, el club nocturno más legendario de la historia unió a la alta sociedad bohemia y a los artistas y músicos que le caían bien a Andy Warhol, una de las grandes autoridades en la sala, el rey de la 'celebrity culture'.
Titulada 'Studio 54: Night Magic', la exposición, que cerró a los dos días de inaugurarse oficialmente el pasado 11 de marzo y se abrirá cuando las circunstancias lo permitan, se compone de fotos, moda, dibujos –como el dedicado a Rubell por Yves Saint Laurent–, películas y centenares de objetos relacionados con la discoteca. A pesar de estar sólo abierta durante 33 meses, Studio 54 se convirtió en un mito de la ciudad moderna por antonomasia.
La muestra sitúa la emergencia de Studio 54 y de su cultura en la época posterior a la Guerra de Vietnam, la de los movimientos por los derechos civiles y de las mujeres, y la de las reivindicaciones y luchas de los colectivos LGBTQ+. La ciudad estaba al borde de la bancarrota y a ella acudía gente creativa de todo el mundo porque entonces pagar una renta en un piso compartido de Manhattan era una utopía posible.
La muestra está comisariada por Matthew Yokobosky, responsable del departamento de Moda y Cultura Material del Brooklyn Museum. Michael Jackson y Elizabeth Taylor solían encontrarse en el sitio reservado para los vips, en el sótano, uno de los lugares menos glamurosos de toda la discoteca. Así nació, según Yokobosky, la 'celebrity culture'. Además de su icónica bola de cristal, una de las imágenes asociadas a Studio 54 es la de Bianca Jagger paseándose por el club sobre un caballo blanco en 1977. No estaba previsto que ella se subiera al caballo. Tenía que montarlo una modelo desnuda para interpretar a Lady Godiva, pero se subió Bianca y aquello acabó siendo 'la fiesta del siglo', recordaba Schrager en una entrevista.