«Agradezco el galardón de PhotoEspaña porque sirve para dar visibilidad al Photomuseum»

Leopoldo Zugaza (Durango, 1932) recibió ayer en Madrid el Premio Bartolomé Ros que otorga PhotoEspaña, por sus méritos como fundador del Photomuseum de Zarautz, que acaba de cumplir 25 años. «Recibo este galardón con una gran satisfacción, porque sirve para dar visibilidad al Photomuseum. Las actividades culturales que se desarrollan en poblaciones pequeñas como Zarautz tienen que hacer frente a todas las dificultades del mundo. Tienen muchos problemas de difusión». El galardón se ha otorgado en el contexto de la edición número 21 de Photoespaña, el festival de fotografía y artes visuales que echa a andar estos días.

Zugaza fundó el Photomuseum zarauztarra el día de San Fermín de e 1992. «Me gusta inaugurar cosas siempre en una fecha destacada», dijo ayer mientras se encontraba tumbado en una cama, descansando del ajetreo de la entrega del premio. Zugaza, de 85 años, ha tenido una lesión en una vértebra de la columna, que le ha llevado a una operación quirúrgica y a una fase en la que puede caminar, pero con un corsé en tórax y espalda. Acudió a Madrid en coche, con su hijo menor Alejandro al volante. «Tal como estoy es impensable conducir», dijo sin perder el buen humor.

Leopoldo cree que «realmente, el mérito es de todas las personas que me han ayudado a lo largo de estos últimos 50 años. Tengo la suerte de haber contado siempre con buenos colaboradores».

Bastante antes de fundar el Photomuseum ya había organizado exposiciones de fotografía. «Decidí ayudar a un arte, el fotográfico, que estaba muy poco valorado. Cuando empecé a montar este tipo de exposiciones en el Museo de Bellas Artes de Bilbao hubo miembros de la Junta a los que no gustó. Entonces se consideraba que era un arte menor, algo fundamentalmente mecánico. Es un gran error; detrás de la foto está siempre el ojo humano».

Cuando se le pide que hable de sus relaciones con los fotógrafos, le viene enseguida a la mente Pedro Zarrabeitia, fallecido el pasado abril. «Fue el protagonista de la primera exposición fotográfica en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, y 25 años más tarde también le montamos una exposición en el Photomuseum. Me acuerdo de lo bien que trabajó en torno a los colores del puerto viejo de Algorta».

Zugaza se niega a que se valoren las actividades y las exposiciones solo en base al número de espectadores. «Zarautz tiene 25.000 habitantes. ¿Qué esperan, que vayan al Photomuseum 125.000 personas?»

Leopoldo Zugaza no fue ayer el único galardonado. Samuel Fosso (Kumba, Camerún, 1962) recibió el Premio PhotoEspaña 2018, por su capacidad de experimentación con el medio fotográfico y su personal uso del autorretrato, según explicó la entidad organizadora del evento, La Fábrica.

Se trata, según el jurado, «de uno de los máximos representantes de la fotografía africana actual» y con este premio se reconoce «su aproximación experimental a la fotografía y su personal uso del autorretrato como herramienta para denunciar los grandes problemas del continente africano».

La obra del camerunés se exhibirá dentro de la sección oficial de PhotoEspaña en la muestra 'Una odisea africana', que se inaugura hoy en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa y que forma parte de la carta blanca 'Players', de Cristina de Middel. En esa exposición, el artista cuestiona la forma en la que tradicionalmente se han explicado cuestiones como el colonialismo, el género o aspectos históricos del continente africano.

El festival PhotoEspaña se desarrolla en varias sedes. Este año, además de los trabajos de Samuel Fosso, se verá la muestra 'El diseño español a través de la fotografía' y 'Descubriendo a Luis Leon Masson'.