Fallecen los dos cachorros de Husky que un vecino de Irun compró online: acusan de estafa al vendedor

Un vecino de Irun ha sido víctima de una estafa singular. Según ha informado este lunes la Guardia Civil de Gipuzkoa en su cuenta de X un hombre de la localidad de Brazatortas (Ciudad Real), anunciaba online la venta de cachorros de Husky que supuestamente estaban vacunados y desparasitados. Sin embargo, los animales llegaban a los compradores con infecciones víricas y fallecían a los pocos días de recibirlos.

Además, el vendedor acompañaba su publicidad con un número de lo que se denomina 'Núcleo Zoológico', una instalación o establecimiento dedicado a albergar, criar, cuidar, vender o mostrar animales, ya sean domésticos, de compañía, fauna silvestre o especies exóticas, pero lo tenía dado de baja desde 2017, careciendo de cualquier tipo de autorización como criadero o como actividad comercial, según han destacado las mismas fuentes.

Por tanto, el hombre está acusado de estafa y de un delito contra la salud y el bienestar animal. Las penas por esto último varían según la gravedad de la acción, pudiendo incluir prisión, multas, inhabilitación para la tenencia o profesión relacionada con animales y trabajos en beneficio de la comunidad.

Fuentes de la Guardia Civil de Gipuzkoa han detallado a El Diario Vasco que un vecino de Irun presentó el pasado 17 de julio una denuncia en dependencias del Instituto Armado con motivo de una presunta estafa en la compra de un cachorro de Husky a través de una página de anuncios de internet. Afirmó que había pagado 550 euros por el perro. Cuando lo recibió en su domicilio lo llevó a un veterinario para una revisión. El especialista le indicó que era portador del virus de la parvovirosis.

Se trata de una de las principales enfermedades virales caninas. Afecta principalmente a cachorros de perro, aunque también puede infectar a gatos, produciendo alteración de las vellosidades intestinales, manifestada clínicamente como diarrea sanguinolenta y maloliente, junto con un deterioro del estado físico e interno del animal. Provoca muerte por septicemia y deshidratación, y en este caso el fallecimiento se produjo a los pocos días.

El comprador se puso entonces en contacto con el vendedor, quien le envió a Irun un segundo cachorro de Husky. De nuevo fue llevado al mismo veterinario que el primero, quien le detectó varias infecciones y un virus. Estuvo ingresado en el centro tres días en observación, hasta que falleció.

El denunciante aseguró a los agentes que los gastos de la compra de los cachorros, sumados a los derivados de las atenciones veterianarias ascendieron a 1.700 euros.

La Unidad Orgánica de Policía Judicial (U.O.P.J.) de la Guardia Civil de Guipúzoca abrió una investigación. Se verificó que el número de lo que se denomina 'Núcleo Zoológico' que el vendedor de los cachorros vinculaba en los anuncios publicados en una página de internet consta de baja desde 2017, de lo que se deduce, siempre según las mismas fuentes, de que el hombre carecía de autorización para este tipo de actividad comercial. Además, las pesquisas llevadas a cabo por el equipo de Seprona de Ciudad Real confirmaron que el anunciante ya había sido investigado con anterioridad por hechos similares. Asimismo, los agentes descubrieron que carecía de criadero alguno o tienda de mascotas, dedicándose únicamente a la compra-venta de cachorros por internet.

El 28 de julio se desplazaron a Brazatortas (Ciudad Real) agentes de la U.O.P. J. de Gipuzkoa. Tras localizar al anunciante se procedió a investigarlo como presunto autor de un delito de estafa y otro contra la salud y el bienestar de los animales. Todas las diligencias fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Irun, quien se encarga ahora del caso.

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