Eibar
Eibar reforzará la seguridad de proximidad con cuatro nuevas plazas de 'auzozain'El Ayuntamiento impulsa una policía más cercana, humana y eficaz con la ampliación de su plantilla de policías de barrio
El Ayuntamiento de Eibar ha dado un paso más en su apuesta por una policía local más cercana y conectada con la ciudadanía mediante ... la creación de cuatro nuevas plazas de auzozain o policías de barrio. Esta figura, ya presente en la ciudad con resultados positivos hace varias legislaturas, se consolida como pilar fundamental de un modelo de seguridad basado en la proximidad, la prevención y la atención directa.
La iniciativa forma parte de un proceso interno que tiene como objetivo adaptar el cuerpo policial a las necesidades sociales actuales, reforzando su capacidad de respuesta inmediata y conexión con el tejido vecinal.
Con esta medida, el Consistorio eibarrés avanza en la construcción de una ciudad más cohesionada, donde la seguridad se percibe no solo como vigilancia, sino también como acompañamiento y servicio público eficaz.
El alcalde de Eibar, Jon Iraola, ha destacado la dimensión estratégica de este refuerzo en el cuerpo local. «De esta manera, conseguiremos una ciudad más cercana, próxima y segura. Queremos que la ciudadanía se sienta acompañada y respaldada por un servicio que no sólo vigila, sino que asesora, informa y ayuda a resolver problemas cotidianos».
Las personas que ejerzan de auzozain desempeñarán sus funciones en cuatro zonas estratégicas de la ciudad: Amaña-Legarre, Urki-Ipurua, Jardiñeta-Zona Este y Zona Centro. Su trabajo no se limitará a la patrulla tradicional, sino que abarcará una serie de tareas con un fuerte componente social: mediación en conflictos vecinales, control de tráfico, vigilancia de parques, prevención de actos incívicos y atención ciudadana directa.
Uno de los elementos diferenciadores de estos agentes será su visibilidad diaria en puntos clave como entradas de colegios, mercados o plazas, desplazándose a pie o en moto, y con un distintivo especial que facilitará su reconocimiento. Este contacto continuo con el entorno permitirá identificar tempranamente situaciones de riesgo, necesidades vecinales o conflictos en fase inicial.
Además, estarán en contacto directo con comerciantes, hosteleros, centros educativos y asociaciones locales, lo que facilitará una comunicación fluida entre ciudadanía y Ayuntamiento, y fomentará un clima de confianza y colaboración. «El papel del auzozain es clave en la prevención de infracciones y en la resolución temprana de problemas», ha subrayado el alcalde. «Gracias a ellos y ellas, podemos conocer de primera mano lo que ocurre en cada barrio y coordinar la respuesta con las diferentes áreas del Ayuntamiento».
Desde el vecindario también se valoraba positivamente este servicio «por la cercanía a la hora de tratar las quejas que se presentaban ante la policía de barrio. No entendí porque se suprimió este servicio», decía un vecino.
Nuevas competencias
En paralelo, la Policía Municipal de Eibar ha comenzado a asumir una nueva competencia que hasta ahora estaba reservada exclusivamente a la Ertzaintza: la recogida de denuncias judiciales por hechos de autor desconocido. Esta medida busca facilitar la vida a los vecinos, que ya no tendrán que desplazarse a otros municipios para formalizar denuncias por delitos como robos en domicilios, daños en vehículos o actos vandálicos.
Este nuevo servicio no solo agiliza los trámites administrativos, sino que contribuye a una gestión más cercana y eficiente de los recursos de seguridad. No obstante, determinados delitos como las estafas electrónicas o el robo de vehículos seguirán siendo competencia exclusiva de la Policía autonómica, debido a su complejidad técnica o carácter supramunicipal.
El propio alcalde ha valorado positivamente esta ampliación de funciones. «Estamos comprometidos con una Administración más cercana y eficiente. Que nuestra Policía Municipal pueda recoger este tipo de denuncias significa mayor comodidad para nuestros vecinos y vecinas, y un paso más en la colaboración interinstitucional con la Ertzaintza».
Con este conjunto de medidas, Eibar se posiciona como un referente en el avance hacia un modelo de seguridad pública más humano, próximo y colaborativo, donde la figura del policía no se limita a la sanción, sino que se convierte en un agente activo en la mejora de la calidad de vida urbana.
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