Eibar

El Eibar defiende esta tarde su condición de invicto contra un Tenerife desdibujado en Ipurua

Los de Joseba Etxeberria deberán evitar por todos los medios cometer el error flagrante que cometieron los blanquillos al regalar los tres puntos con aquel gol en propia puerta. El Eibar deberá ser el de la eficacia defensiva y concentración que está caracterizando en este inicio de liga, con los destellos ofensivos que está dejando.

8 puntos y cero derrotas dan buen seguro de las capacidades de esta plantilla armera que bien puede catalogarse de navaja suiza: hay herramientas para todo. La competitividad existente en cada demarcación está sacando lo mejor de cada jugador, de momento sin trastocar el gran ambiente del vestuario. Tan solo podría asegurarse la continuidad en el once inicial de Arbilla, Matheus y Jon Bautista, pilares fundamentales; el resto, decide el cuerpo técnico.

Sin embargo, en el Tenerife no todo es de color de rosas. Sumado a la racha negativa en Ipurua, los rivales de esta tarde son el farolillo rojo en esta jornada 5, que querrán tener la primera victoria de la temporada rompiendo esta estadística. El equipo entrenado por Óscar Cano tendrá la baja del mediocentro Álex Corredera, clave en el once de la temporada pasada. Se ha marchado al Khimki ruso, lo que ha supuesto la gota que colma el vaso para una afición que demanda más de José Miguel Garrido, máximo accionista del club. La tensión y el descontento es tal que la hinchada ha convocado una manifestación para el partido de la jornada que viene, ante el Sporting de Gijón.

Quien sí estará, al menos convocado, es el punta Marlos Moreno, último fichaje blanquiazul. El jugador aseguraba en su presentación necesitar más tiempo para llegar a la plenitud física, pero puede contar con minutos para hacer daño. El Eibar puede hacer leña del árbol caído.