Deba

Las nuevas instalaciones del colegio público Luzaro en Itziar, listas para el próximo curso

Las nuevas instalaciones del colegio Luzaro de Deba que el departamento de Educación del Gobierno Vasco está construyendo en el histórico edificio que en su día albergó el viejo ayuntamiento de Itziar estarán listas para empezar a funcionar el próximo mes de septiembre, esto es, coincidiendo con el inicio del nuevo curso escolar 2025/2026.

Así lo anunció la consejera de Educación, Begoña Pedrosa, durante la visitá que cursó ayer por la mañana al nuevo espacio educativo, que comenzará su andadura dando servicio a 48 niños y niñas de Educación Primaria.

Acompañada por la directora del colegio Luzaro, Ana Delgado; la alcaldesa de Deba, Alazne Txurruka; la alcaldesa de Itziar, Arantza Egaña; y la delegada territorial de Educación en Gipuzkoa, Amaia Urzelay, la consejera de Educación mostró su satisfacción por el resultado del proyecto que está a punto de terminar y que ha supuesto una inversión «de cerca de 1,9 millones de euros».

De hecho, el antiguo ayuntamiento de Itziar ha sido completamente rehabilitado para transformarse en un moderno centro escolar. Con esta actuación, «el departamento de Educación pone en valor un edificio de gran valor patrimonial y comunitario, dotándolo de una nueva vida como espacio educativo».

No en vano, la intervención materializada ha consistido en «una rehabilitación integral que respeta la estructura original del edificio, sus fachadas protegidas y los elementos arquitectónicos más significativos». El nuevo centro contará con 358,96 metros cuadrados de superficie útil interior distribuidos en tres plantas: en la planta baja se ubican el soportal abierto a la plaza, un aseo accesible y salas técnicas; mientras que en las plantas superiores se disponen tres aulas, aseos y una sala de profesorado. A ello hay que sumar 132,86 metros cuadrados de superficie útil exterior, entre los que destaca un soportal comunitario de más de 100 metros cuadrados. La colocación del ascensor se completará este verano.

El nuevo edificio, que desde el inicio ha sido concebido «con criterios de sostenibilidad, eficiencia energética y accesibilidad universal», sustituirá al edificio provisional que ha venido acogiendo hasta ahora las aulas en la casa parroquial.

La puesta en marcha del nuevo colegio permitirá destinar el espacio de la casa parroquial a nuevos usos comunitarios como biblioteca, salas de estudio o clases de idiomas.