La investigación de la muerte de la vecina de Deba, a la espera del informe de la Científica
Fuentes de la Fiscalía señalan que si los análisis balísticos concluyen que el disparo en la batida de caza fue accidental podría considerarse un caso de imprudencia leve
Avanza la investigación por la muerte de la mujer de 75 años en Deba tras recibir el impacto de una bala procedente de un ... rifle de una batida de caza, que causó una honda conmoción en el municipio costero, el pasado 17 de diciembre. Un amplio dispositivo de la Ertzaintza continúa analizando las circunstancias en las que se produjo esta tragedia. Una vez cerrado el atestado por parte de la Policía Judicial, se espera ahora a los informes de la Policía Científica que determinarán cómo se produjo el disparo, así como el autor del mismo. Los recursos de balística permitirán analizar las trayectorias de los proyectiles e identificar cuál fue exactamente el arma de la que salió el proyectil. También estaba pendiente la necropsia de los animales, ya que de los dos jabalíes que en concreto cayeron abatidos en el entorno más cercano a la vivienda de la víctima había alguno que contaba con orificio de entrada y de salida, según informó el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, en los días posteriores al suceso.
En caso de que la Policía vasca concluya que el suceso ha sido fruto de un fatal accidente, fuentes de la Fiscalía indican que podría ser tipificado como un caso de imprudencia leve, ya que se trataba de una batida autorizada y «no habría ninguna intención de disparar a una zona poblada».
El origen del disparo que acabó con la vida de esta vecina estaba en una batida de jabalíes que un grupo autorizado de 23 cazadores estaba llevando a cabo en un bosque próximo. En Gipuzkoa existe un convenio que regula la caza mayor para dos especies de las que hay sobrepoblación en estos momentos, los jabalíes y los corzos. Es la Federación de Caza de Gipuzkoa la que se encarga de realizar las batidas, con la autorización de la Diputación y cumpliendo con las medidas de seguridad establecidas. Fuentes del ente foral consultadas afirman que «existe una investigación en curso que está llevando la Ertzaintza para aclarar lo sucedido» por lo que, en tanto no se conozcan los resultados, no pueden realizar ningún tipo de pronunciamiento a la hora de valorar un posible cambio de los protocolos actuales o cualquier modificación en la normativa. En cualquier caso, la ley que regula la caza mayor en Euskadi es de nivel autonómico y, para realizar cualquier modificación, sería una cuestión que debería abordarse en el Parlamento Vasco.
La ley fija en 200 metros la distancia de seguridad para cazar en núcleos urbanos como el de Deba. Según informó el consejero de Seguridad, todos los cazadores se encontraban dentro del perímetro delimitado para ello. Las balas, que pueden alcanzar entre los 600 y los 800 metros de distancia, tienen que quedar enterradas en el terreno, según expone la ley. La peor fortuna imaginable quiso que el proyectil no solo atravesara la ventana del domicilio de esta mujer, sino que impactara contra ella y le causara la muerte.
Los hechos ocurrieron el pasado 17 de diciembre, sobre las 15.00 horas, cuando la mujer se encontraba en el interior de su casa. En ese momento, una bala impactó contra la ventana e hirió en la cabeza a Satur, de 75 años, oriunda de Extremadura pero que llevaba muchos años residiendo en la localidad, donde era muy querida por sus vecinos.
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