Deba
«La clasificación para el mundial de Grecia es un premio a mucho esfuerzo y sacrificio»El joven debarra Oinatz Irusta se prepara a fondo para tener opciones de victoria en el campeonato del mundo de Jiu-jitsu que se disputa del 1 al 4 de noviembre
Jabi Leon
DEBA.
Miércoles, 10 de septiembre 2025, 20:14
La villa griega de Leutraqui (Loutraki en griego) acogerá entre los días 1 y 4 del próximo mes de noviembre la disputa del campeonato del mundo de Jiu-jitsu; un evento deportivo en el que tomará parte el debarra Oinatz Irusta García. Este joven, de 16 años, acudirá a la cita de Grecia para competir en la categoría Sub-17 «por debajo de 50 kilos».
Oinatz se ganó el billete para el mundial en los campeonatos de España que se celebraron el pasado mes de febrero en Albacete. En aquella competición el joven de Deba se proclamó campeón de España de su categoría en la modalidad de Jiu-jitsu con kimono; y subcampeón estatal en la disciplina que se disputa sin kimono.
«Es muy diferente pelear con kimono o sin él. El kimono condiciona muchos aspectos de las peleas, sobre todo a la hora de agarrar al adversario», señala el propio Oinatz, que se encuentra «muy motivado e ilusionado» de cara al mundial de Grecia.
Oinatz Irusta acudirá al campeonato del mundo de Jiu-jitsu para competir en la categoría Sub-17, por debajo de 50 kilos
El joven, que estudia un módulo de soldadura en Zumaia aunque en un futuro le gustaría ejercer profesionalmente como bombero, considera su clasificación para el mundial «un premio a muchas horas de esfuerzo y sacrificio» y espera llegar a esa importante cita en las mejores condiciones físicas.
Eso sí, para ello deberá recuperarse de una pequeña lesión en el hombro que estos días le está impidiendo entrenar con normalidad.
Según cuenta, «este verano he estado entrenando a tope, unas cuatro horas diarias y cinco o seis días semanales, por lo que he llegado a estas fechas en un momento muy bueno. Espero recuperarme bien y pronto de la lesión del hombro para seguir con mi preparación».
Oinatz entrena habitualmente con el equipo Gracie Barra de Zarautz, aunque muchos sábados se desplaza hasta la localidad fronteriza de Irún para participar en unos entrenamientos específicos de competición.
Además de diferentes técnicos, en esas sesiones coincide con Eric y June, dos jóvenes irundarras que también se han clasificado para el mundial de Grecia.
Los tres deportistas guipuzcoanos no estarán solos en el país heleno. A Oinatz «le acompañaremos toda la familia», explica ilusionado su abuelo Antonio García, que ha estado «toda la vida» involucrado en el mundillo del boxeo, ejerciendo de entrenador y otras muchas funciones.
Inicios y evolución
El debarra Oinatz Irusta apenas tenía seis años de edad cuando se adentró en el mundo de las artes marciales. En un primer momento empezó a practicar karate y judo, pero poco a poco se fue acercando a otras especialidades como la capoeira o el boxeo.
Hasta que hace un par de años conoció el Jiu-jitsu; un arte marcial japonés clásico que abarca una variedad amplia de sistemas de combate modernos basados en la defensa «sin armas» de uno o más agresores, tanto armados como desarmados.
Según cuenta el chaval, «conocí el Jiu-jitsu a través de MMA (las siglas de Mixed Martial Arts o Artes Marciales Mixtas, en español) y por medio de mi amigo Akram, que lo practica en Zarautz».
Oinatz se quedó enganchado al Jiu-jitsu desde que tuvo el primer contacto con esa disciplina; y más aún desde que empezó a tomar parte en competiciones: «unos seis meses después de empezar a practicar Jiu-jitsu disputé mi primer combate en Gasteiz y aunque estuvo muy igualado no se me dio mal. Acabé ganando con kimono y segundo sin kimono, con la particularidad de que tuve que enfrentarme a tres rivales mayores que yo», recuerda el joven.
Oinatz reconoce que es «muy competitivo» y que le está costando mucho «seguir la dieta para mantenerme por debajo de 50 kilos». Aún así, afirma que irá al mundial «a por la victoria».
Tras el campeonato del mundo el joven debarra asegura que seguirá con el Jiu-jitsu, «pero también me gustaría competir en boxeo y, más adelante, en la liga de artes marciales mixtas», sentencia.