Bergara
Un proyecto educativo de Laboratorium Museo reconocido a nivel internacionalHan logrado el tercer premio del certamen Ibermuseos de Educación por un programa de estimulación sensorial
Juan Antonio Migura
bergara.
Martes, 25 de noviembre 2025
El proyecto de Laboratorium Museoa 'Latidos del jardín, ecos del museo: un viaje sensorial para la inclusión' ha sido galardonado en la decimotercera edición de los Premios Ibermuseos de Educación. Es una de las diez iniciativas distinguidas de entre más de 200 propuestas recibidas de diecisiete países en una convocatoria que reconoce los proyectos educativos iberoamericanos.
La apuesta bergaresa está centrada en la educación inclusiva a través de la estimulación sensorial. El concurso valora de los participantes la atención hacia las comunidades, las formas de narrar y el papel clave como agentes de cambio. Han tomado parte museos de Brasil, Argentina, Colombia, Ecuador, Chile, República Dominicana, Uruguay y España.
Laboratorium Museo se ha hecho con el tercer premio que llena de satisfacción a sus responsables, «hemos recibido el reconocimiento por el carácter innovador del proyecto, su sostenibilidad y el impacto positivo que genera en el contexto en el que se desarrolla», apunta Rosa Errazkin, directora del Museo Laboratorium.
«Nos han premiado junto a museos de renombre mundial. Estamos muy felices. Ese es el resultado del trabajo bien hecho. El proyecto presentado es muestra de la esencia de Laboratorium. Es una herramienta educativa y mediadora para la mejora de la sociedad. El premio llega además en un momento especial, en la recta final de la celebración de nuestro décimo aniversario. Es una buena manera de poner la guinda a este aniversario», añade Errazkin.
Un viaje sensorial
El proyecto 'Latidos del jardín, ecos del museo: un viaje sensorial para la inclusión' activado este año tiene un precedente en 2024 cuando pusieron en marcha 'Jardín Sensorial'. Una innovadora apuesta de educación inclusiva desarrollado en el jardín de estilo inglés del palacio de Errekalde, sede de Laboratorium.
Estaba concebido para personas con Alzheimer en fase inicial, el programa se amplió para incluir colectivos en riesgo de exclusión social, reforzando así el compromiso del museo con la accesibilidad y el bienestar comunitario.
La idea surgió en colaboración con un proyecto desarrollado por la EHU, el Gobierno Vasco y Gertu Kultura, contando con expertas en psicología de la universidad, que asesoraron en la creación de una experiencia multisensorial adaptada a las necesidades de las personas participantes.
La fase piloto fue realizada con residentes de Mizpirualde y constató un impacto altamente positivo. La interacción con el entorno natural despertó recuerdos, promovió la relajación y fortaleció el vínculo social de los y las participantes.
El éxito de 'Jardín Sensorial' ha impulsado la ampliación hasta llegar a 'Latidos del jardín, ecos del museo: un viaje sensorial para la inclusión', que incorpora nuevos grupos como menores y jóvenes con autismo y personas en situación de soledad.
El museo ha adaptado los espacios sensoriales con elementos de estímulo visual, táctil y auditivo, «se han elaborado materiales accesibles de lectura fácil y pictogramas, y se ha ofrecido formación especializada al equipo de mediación», indican en Laboratorium, que refuerza su papel como un espacio de transformación social, promoviendo la educación, la inclusión y la sostenibilidad a través de la cultura.
Regalo de cumpleaños
La distinción internacional viene a sumarse a eventos y reconocimientos en su décimo aniversario. El centro continua apostando por lo local y lo universal+, por el «emprendimiento y conocimiento, eficacia, socialización y curiosidad, y progreso. Eso y mucho más es el museo. Es una de las cunas de la ciencia en Euskal Herria, que recoge, cuida, investiga y da a conocer el patrimonio a través de colecciones científicas, química, física y zoología», destacan.
Un espacio para todos los públicos y con variedad de herramientas como exposiciones, programas, visitas guiadas, excursiones, talleres, colonias, y otras que persiguen « introducir y acercar el mundo de la ciencia a la sociedad. Conocer de cerca el mundo de la ciencia y convertirse en mediador de la transmisión».
Si los hermanos Elhuyar pusieron a Bergara en el mapa de la ciencia en XVIII, el museo trabaja en el XXI para seguir siendo referente en el impulso del conocimiento y la innovación, «el museo está trabajando como motor de conocimiento e innovación. Recordando las aportaciones a lo largo de la historia, sigue mirando hacia el futuro, trabajando por una sociedad mejor y más sabia», señalan.