El consistorio reduce la factura energética en un 25 por ciento en cuatro años
Desde 2017 ha invertido un millón de euros en sustituir con tecnología LED el 60% de las 4.500 farolas que constituyen el alumbrado público
El ayuntamiento ha reducido la factura energética en un 25 por ciento desde 2017. De los 750.501 euros que gastó en aquel año, la factura del consistorio descendió a 561.046 euros en 2021. Del mismo modo, el consumo energético también ha descendido de 4.362.883 kWh en 2017 a 3.308.192 kWh el año pasado.
El grueso de este consumo energético proviene de las instalaciones deportivas municipales. Musakola, Mojategi, Iturripe y Uarkape consumen conjuntamente «siete veces más que el ayuntamiento», advirtió la alcaldesa María Ubarretxena.
Los datos facilitados por el ayuntamiento muestran que solo el polideportivo de Musakola gastó el año pasado 68.000 euros en energía y 45.409 euros en gas, y que su consumo se cifró en 605.800 kWh. En el mismo periodo el ayuntamiento gastó 12.322 euros con un consumo de 86.462 kWh.
Como decía el concejal de deportes Ander Garay, el «camino hacia la transición energética está en marcha, y en Iturripe se han invertido este año 32.000 euros para sustituir las lámparas por otras de tecnología LED. El siguiente paso será cambiar las de Uharkape, con una inversión de 30.000 euros a los que se sumarán otros 40.000 para instalar placas solares sobre la cubierta». Quedan pendientes Musakola y Mojategi, cuya sostenibilidad futura pasa por la transformación que se derivará del mapa de instalaciones deportivas que prepara el consistorio.
Por de pronto, los planes de sostenibilidad a corto plazo pasan en Musakola por reducir la temperatura del agua de las piscinas cubiertas y la climatización del recinto. Garay detalló que la piscina pequeña bajará de 32 a 31 grados y la grande, de 28 a 27. Y la climatización, de 27 a 26 grados. Y añadió que por cada grado que se baja el agua y la climatización se ahorra un 7% en gas y otro 7% en electricidad.
El ayuntamiento estudiará si más adelante si «con la reducción de 1 grado será suficiente o si hay que bajar aún más la temperatura del agua». Garay admitió sin embargo también que «hay que respetar una temperatura mínima para la práctica de la natación».
Iluminación pública
La transición energética que impulsa el consistorio progresa especialmente en la iluminación pública. Actualmente Arrasate cuenta con 4.500 farolas de alumbrado público y «desde el 2017 se ha invertido un millón de euros para cambiar a tecnología LED 2.680 farolas, lo que supone el 60% del total» explicaba el concejal de servicios y mantenimiento, Victoriano Fuentes.
En 2021 «gastamos en alumbrado público 162.500 euros consumiendo 1.400.224 kWh», siendo enero y diciembre los meses con mayor consumo (19.348,69 euros y 14.112,95 euros respectivamente) y junio (9.915 euros) los de menor consumo, ya que es el mes con más luz natural.
Antes de la implantación de las luminarias LED, el ayuntamiento desembolsó en 2017 la cantidad de 298.427 euros por consumo de luz en la vía pública, casi el doble que en 2021. En términos de consumo, el alumbrado público ha pasado de consumir 2.150.58 kWh a 1.400.221 KWh.
Y sobre todo «también contribuimos a la reducción de las emisiones de CO2. Concretamente 34,80 toneladas menos» recalcaba Fuentes.
El edil recordó asimismo que «este cambio de tecnología supone que en menos de cuatro años estamos amortizando el costo de la inversión con el ahorro que obtenemos». Y anunció que 2023 continuarán con la implantación de la tecnología LED tanto en el alumbrado público como en edificios municipales.
