La izquierda abertzale oficializará hoy su respaldo a que ETA lo deje

Los dirigentes de la izquierda abertzale no ocultaban ayer su satisfacción con el desarrollo de la Conferencia de Paz. La formación independentista acompañará el acto de ayer con una declaración solemne de adhesión a sus conclusiones que hará pública esta mañana en un hotel de San Sebastián, según fuentes de este sector político. De esta forma, la izquierda abertzale, representada ayer en el cónclave por Rufi Etxeberria y Juan Joxe Petrikorena, oficializará la demanda a ETA de que abandone las armas definitivamente, en un nuevo paso que se suma a los dados en febrero, en la presentación de los estatutos de Sortu, cuando dejaron claro su rotundo rechazo a la actividad armada de la organización.

La claridad e importancia de la declaración de los seis líderes internacionales es asumida por la antigua Batasuna, que también exigirá al Estado que se implique en el final de la violencia adoptando medidas penitenciarias o promoviendo la legalización de Sortu.

El secretario general de Eusko Alkartasuna, Pello Urizar, explicó, en su intervención, la «hoja de ruta» que su partido propone para «la resolución del conflicto político en Euskal Herria», que a su juicio debe «realizarse en ausencia total de violencia y en torno al diálogo político y las vías democráticas».

Propuso la constitución de una mesa de partidos para tratar el «conflicto político», y de otra mesa «técnica» en la que ETA y los Estados español y francés discutan sobre «presos» y «desarme».

Tras repasar los pasos dados por la izquierda abertzale y ETA, Urizar reclamó a los gobiernos español y francés que «muevan ficha y apliquen medidas como el acercamiento de presos o el fin de la aplicación de la doctrina Parot». El siguiente paso, según Urizar, sería la constitución de una «mesa técnica» en la que «ETA y los gobiernos español y francés hablarían exclusivamente de la situación de los presos, el desarme y la destrucción de armas». El líder de EA ha dejado claro que «a ETA no le corresponde ningún otro papel». También señaló que «es tarea y obligación de todos el reconocimiento, reconciliación y reparación de todas las víctimas, sin excepción».

El dirigente de EA opinó que, «en ausencia total de violencia», los partidos vascos deben «sentarse en torno a una mesa y alcanzar un acuerdo para la resolución del conflicto que vive este país». «Un conflicto que consiste en solucionar el contencioso vasco ajustando el marco jurídico a las pretensiones mayoritarias de la sociedad vasca por vías democráticas, legales y pacíficas», señaló.

«Pasos a todas las partes»

En declaraciones a los periodistas tras finalizar la cumbre, Urizar señaló que la sociedad vasca «no entendería» que no se aprovechara «este momento» para conseguir el fin de la violencia. Se felicitó por el hecho de que el resultado de esta cumbre sea una declaración final con una serie de puntos que «solicitan claramente pasos a todas las partes».

El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, salió también satisfecho de la reunión. Aseguró que la conferencia ha puesto los «cimientos» del «camino hacia una paz justa y duradera» en el País Vasco.

En su discurso en la sala Gandhi, propuso que para consolidar el proceso de resolución del conflicto vasco iniciado en Euskadi «todos los agentes implicados (ETA, gobierno, cuerpos armados, etc.) den pasos para afianzar un escenario de paz». Asimismo, expresó el compromiso de su formación con «una paz justa y duradera» en Euskadi. «Por ello -agregó- no nos reconocemos en los discursos de quienes, desde una pretendida necesidad de victoria moral, exigen vencedores y vencidos».