Aguado: «Hay niños que desarrollan un lenguaje demasiado básico, pero no son tontos»
«Casi la mitad de los pequeños que a los dos años no saben al menos cincuenta palabras tendrán problemas de habla», asegura
MACARENA TEJADA
Miércoles, 2 de septiembre 2015, 07:34
Gerardo Aguado Alonso, psicólogo y doctor en Ciencias de la Educación, lleva desde 1970 investigando los problemas en el proceso de adquisición del lenguaje. Este experto en niños que padecen Trastorno Específico del Lenguaje (TEL) impartió recientemente una charla titulada 'Desarrollo típico del lenguaje en el niño e indicadores de riesgo de dificultades persistentes' en el marco de los Cursos de Verano de la UPV/EHU en el Palacio Miramar de San Sebastián.
-¿Cuáles son los trastornos más habituales en el proceso de adquisición del lenguaje?
-Los más comunes son tres. El más leve es el Trastorno de Articulación, es decir, cuando un niño no es capaz de decir un sonido sin alterar ningún otro. Los que más se cambian son los más difíciles, la 'r' y la diferencia entre la 's' y la 'z'. Entre los hispanohablantes, por ejemplo, más del 90% no dicen bien la 'z'. El segundo es el Trastorno de Habla. Aquí se alteran las secuencias de los sonidos. Por último está el Trastorno Específico del Lenguaje (TEL), que es el más severo. Es cuando los pequeños no poseen la riqueza de vocabulario habitual de niños de su edad. Se da en ausencia de causas evidentes.
-Si no hay razones claras se deduce que no existe forma alguna de prevenir este problema.
-Así es, los niños nacen con este tipo de trastornos. Son personas con una inteligencia y educación normal. No han tenido ningún tipo de alteración en su comunicación, escuchan bien y no tienen problemas neurológicos. No son estúpidos, pero desarrollan un lenguaje muy limitado desde el punto de vista léxico y semántico. Esto es, tienen problemas para hablar correctamente.
-¿Cómo se puede detectar esto en casa?
-El trastorno específico del lenguaje contiene los otros dos, por lo tanto la identificación en general es bastante sencilla. Además, el 42% de los niños que a los dos años justos no tengan cincuenta palabras inteligibles para su entorno familiar o que no emitan enunciados de dos palabras van a tener un trastorno persistente, el TEL. Si a los tres años el niño aún no tiene un lenguaje como los demás las probabilidades suben al 80%. A los cuatro años ya se diagnostica el trastorno. Los profesores suelen detectar este problema muy bien.
-¿El tema del habla preocupa en exceso a los padres?
-Me he encontrado con todo tipo de padres. Actualmente sí les preocupa, pero yo creo que de una forma adecuada, como debe ser. Este es un problemas importante.
-¿Cuál es su papel cuando se dan estas circunstancias?
-Los padres tienen que ir avisando a los pediatras de lo que observan en casa y estos profesionales tienen que dejar el consejo de «no te preocupes, que ya hablará», porque en el 42% de los casos no va a ser así. Hay que empezar a trabajar con los pequeños desde los dos años aunque no estén diagnosticados. Cada noche, por ejemplo, habría que contarles el mismo cuento, así día el pequeño se lo aprenderá y te sustituirá. La clave está en repetir el proceso siempre de la misma manera. El niño quiere regularidades, no hay que ser creativos con ellos. Es una logopedia muy barata ya que se hace en casa.
-¿Cómo se puede curar el TEL?
-No se puede acabar con el Trastorno Específico del Lenguaje porque es evolutivo.
-¿Y el tratamiento?
-Gracias al tratamiento, el pequeño consigue aproximarse al resto de su edad, pero es muy difícil conseguir la misma riqueza verbal. No conocemos a niños sin tratamientos porque por suerte hay logopedas en todos los colegios. Aunque podría haber algún niño que sin acudir a profesionales mejorara, sería un error enorme no tratarlos porque es evidente que los que reciben terapia mejoran mucho más que los que no lo hacen.
-¿Que el niño no hable podría significar que no entienda lo que se le dice?
-Ese suele ser el problema más grave. El inicio del TEL es tener poco vocabulario. Esto está asociado a la comprensión ya que una persona asocia diferentes términos que ha oído durante su vida, pero a un niño con TEL se le olvida el vocabulario tanto productivo como receptivo. Las palabras de las cosas que tiene a mano las entiende aunque no las diga, pero las nuevas se le olvidan con facilidad.
-¿Existen diferencias entre niños y niñas?
-Sí. Hay más niños que niñas con problemas de lenguaje, pero una vez que ellas también tienen inicio tardío, la evolución es la misma para ambos sexos.
-¿Este tipo de problemas podrían asociarse con otros emocionales o sociales?
-Claro que sí. Una persona con un problema de lenguaje que vea que los demás niños hablan menos con él lógicamente va a empezar a sufrir. Hasta 1981 no se utilizó el término TEL, por tanto, los más mayores diagnosticados de este trastorno tienen 35 años. Se les ha hecho seguimiento y alrededor del 35% tienen trastornos psiquiátricos de mayores, como ansiedad y depresión. Algunos de los varones, además, son antisociales. De todas formas, esto son la minoría, ya que el 65% no tienen ningún trastorno psiquiátrico.