«El baño es la mejor terapia»
Ramón Zabalza vive la popularidad como protagonista de un spot
MITXEL EZQUIAGA
Miércoles, 13 de enero 2010, 08:51
Sale estos días en pantalla más que los presentadores del telediario. Ramón Zabalza, donostiarra de 64 años, vive la inesperada popularidad con una mezcla de ironía y resignación.
Este deportista que espera jubilarse dentro de unos meses protagoniza un spot publicitario de Actimel que se repite en las últimas semanas en cadenas televisivas y emisoras de radio. En el anuncio Ramón Zabalza aparece nadando en pleno invierno en mitad de la bahía y sale luego del agua en la playa de La Concha, donde le espera la periodista Susana Griso para comentar las bondades energéticas del yogur bebido.
«Yo sólo soy un puro accidente, un representante de los donostiarras que nos bañamos diariamente en el mar», explica con humildad este 'famoso por accidente'. «Para mí lo importante es que el protagonismo recaiga en nuestro club, el Atlético de San Sebastián, que es el mejor del mundo porque tiene la piscina mayor y más bella: la bahía», explica Zabalza. «Y el baño diario es la mejor terapia, para la cabeza y el cuerpo: cuanto más fría está el agua al entrar, mayor es la satisfacción al salir».
Todo empezó por casualidad. «Una mañana de sábado, a primeros de diciembre, yo salía del mar y me esperaba en la orilla un muchacho de una agencia de publicidad catalana. Me preguntó si estaría dispuesto a participar en un anuncio y me hicieron fotos». Fue un 'casting' que incluyó a otros socios del Atlético. Días después, Ramón Zabalza recibió la llamada de la agencia: le proponían ser el actor. ¿Y pagan bien? «No está mal, aunque después del rodaje y pasar tantas horas en el agua pensé que quizás podía haber pedido más».
Los días 18 y 19 de diciembre se rodó el anuncio. La productora trajo a San Sebastián un equipo de 35 personas que no escatimó medios para completar la película de 30 segundos. «Menos mal que era para medio minuto: para hacer 'Ben Hur' hubiésemos necesitado años».
La primera mañana de rodaje fue la más dura. «Tuve que nadar en medio de la bahía. Primero se lanzó una 'liebre', o sea, un chaval joven con traje de neopreno, para que los técnicos midieran la luz y afinaran el encuadre desde la embarcación. Luego me tiré yo... Y rodamos cuatro inmersiones de diez minutos cada una: al final estaba pajarito», confiesa Zabalza.
El día siguiente de grabación fue en la playa, interpretando sus diálogos con la periodista Susana Griso, «encantadora, por cierto».
Hace una semana y media comenzó a emitirse el anuncio y su protagonista goza (o sufre) la popularidad y las bromas de sus amigos o compañeros de club.
«Yo me bañaba en el puerto de crío, era de aquellos chavales de 'perrita al agua, caballero'», dice. «He compaginado siempre el deporte con lo laboral. Trabajé en una empresa informática y en otra relacionada con el hierro, y ahora espero jubilarme». Su reto más inmediato es salir la semana que viene en la tamborrada de Gure Borda, en Gros, «donde tenemos los uniformes más bonitos, inspirados en un batallón escocés, con faldas... y al final, también a lo loco».