«Otegi quiere el final pero no se atreve a ser Gerry Adams»

-¿Cómo valora el papel desarrollado por Arnaldo Otegi?

-Otegi ha intentado buscar un final porque lo quiere, pero el problema es que la dependencia que tiene respecto a ETA es tan grande que se queda sin libertad de movimientos. Adams no condena las acciones del IRA del pasado pero sí plantea pasos para el futuro. Otegi no se atreve a ser Gerry Adams. Ése es el problema.

-Rubalcaba dijo que la cuestión de los presos no fue planteada por ETA durante el proceso. En Irlanda del Norte los presos se reagruparon...

-En Irlanda casi siempre han estado agrupados, no hubo dispersión. Cuando estuve con Nicolás Redondo y Mario Onaindía para estudiar cómo se hizo el acuerdo de paz nos insistieron mucho en que la dispersión de presos tenía sentido cuando se buscaba la dispersión individual, separando a los 'duros' de los que querían reinsertarse para que no sufrieran las presiones. Pero nos dijeron que para un proceso final siempre era mucho mejor que estuvieran agrupados porque de ahí surgían las contradicciones, yo en un determinado momento sí fui partidario del acercamiento pero sin discutirlo con ETA y sin nada a cambio. Pero entiendo los argumentos que tenían otras personas, entre otros que ETA nunca lo había planteado, que tenían que tomar decisiones y no los acercaron.

-¿Cómo interpreta el papel de Ibarretxe, que ahora saca la bandera del derecho a decidir?

-Ahora tampoco, que lleva cuatro años con el plan Ibarretxe y el derecho a decidir. Todo el tema de las consultas es un verdadero galimatías como en la época de la universidad cuando se votaba en una asamblea a ver si se votaba o no. Nunca se nos dice cuál es la pregunta. En una democracia todo tiene su límite, el derecho a decidir dentro de las competencias de cada cual, muy bien. El derecho a decidir que lesiona derechos de terceros, ¿es democrático?

-¿Su libro es pesimista?

-Es ciclotímico, contiene momentos de enorme esperanza y otros de gran desilusión y tristeza. Y recoge también una reflexión sobre las ideologías de lo absoluto. Muchas ideologías hacen una apuesta por el todo y dejan en el camino soluciones intermedias, que son las que más benefician a los pueblos. ETA es un ejemplo de ello. Ojalá que la fortaleza de la democracia española precipite el desestimiento del terrorismo.