«Estamos muy agradecidos a los tolosarras»

Estas semanas hemos visto imágenes de concentraciones que han realizado en las plazas del municipio para hacer públicas sus reivindicaciones, han repartido lazos solidarios a los ciudadanos y han gestionado todo el material que los tolosarras han donado en solidaridad por la guerra en Ucrania. «Estamos realmente agradecidos a los tolosarras, nos estáis ayudando mucho», recalca un grupo de voluntarias en el exterior del local.

Es una iniciativa que se puso en marcha hace dos semanas de forma exprés, organizada por la asociación Ana Yurd con la comunidad ucraniana del municipio, la Asociación Socio Cultural y de Cooperación al Desarrollo Ucrania-Euskadi y la Asociación para la Promoción de la Cultura Oriental Vostok-Ekialde (Lira), que ha contado con el apoyo e impulso del Ayuntamiento de Tolosa.

La comunidad ucraniana en Tolosaldea está formada por 211 personas según datos de 2021 facilitados por el departamento de Migración de Tolosaldea Garatzen. Hablamos con varias personas que trabajan como voluntarias y que acuden al local todos los días de la semana.

Valerii y Viktoriya, vecinos de Odesa, llegaron a Tolosa hace tres semanas, justamente un día antes de que estallara la guerra, para ver los carnavales. Valerii afirma que habla algo de español porque todos los años viajan a España para descansar en vacaciones. Ambos destacan la tristeza que sienten por la situación que vive su país, especialmente por los niños, «Estamos aquí porque no podemos ir a Ucrania, no podemos volver. Nuestros hijos y demás parientes permanecen allí. Estamos en casa de nuestros amigos en Tolosa, pero no podemos estar mucho tiempo. Además, vinimos con dos maletas pequeñas de ropa. Necesitamos una casa donde podamos vivir este tiempo. Nuestra hija y yerno están en Odesa, mi hijo está en Moldavia y es voluntario, ayudando a llevar medicamentos a Ucrania. Tenemos esperanzas de que la situación cambie, pero al mismo tiempo tenemos mucho miedo. Si es así, volveremos pero si tenemos amenaza rusa no volveremos nunca. Podemos hablar con nuestros familiares, pero no siempre ni cada hora, ya que permanecen en los refugios y allí no hay internet. Estamos muy tristes por todos los niños inocentes que están muriendo. Es terrible», concluyen.

Mariia Marfichuk y Nadia son dos tolosarras de origen ucraniano, vecinas de Banyliv Pidhirnyi, una pequeña aldea de Chernivtsí, al suroeste de Ucrania, «similar a Ibarra, de no más de 4.000 habitantes», detallan. Mariia lleva diez años viviendo y trabajando en Tolosa, junto con sus hijos y nietos, quienes hablan euskera desde pequeños. Cuenta que dos sobrinos que residen en Ucrania trabajan como voluntarios en la guerra, mientras el marido de su sobrina está enfermo en el hospital. «Hace unas semanas nos dijo que estaba bien pero no sabemos si será verdad o nos lo dijo para tranquilizarnos. No tenemos noticias suyas», señala.

Nadia estuvo anteriormente en Tolosa, pero tras pasar varios años cuidando a su madre en Ucrania, volvió y su hija, una vez finalizados los estudios aquí, regresó para cuidar a su abuela. «Mi madre me dice que no va a moverse de casa y mi hija que no le dejará sola. La zona está algo más tranquila, aunque hay alarma y están recibiendo refugiados. Como vivimos cerca de Rumanía, nuestros hermanos, sobrinos... todos han ido a ayudar como voluntarios en la guerra, Las mujeres y los niños pueden ir a la frontera con Polonia, pero ellos tienen que estar allí para defender su casa o lo que queda de ellas. Hay familias que tienen conocidos en Polonia y están dejando a sus niños allí, pero no pueden dejar a sus abuelos o maridos en Ucrania y se quedan para ayudar como pueden. Es una situación complicada, pero es así», añade.

Con las esperanzas puesta en el final de la guerra, ambas desean que la situación cambie lo antes posible. «Pensamos que Putin se echará para atrás después de las sanciones. La población rusa tiene miedo y estamos viendo que mucha gente está yendo a la cárcel. Han destrozado nuestros hogares, han borrado nuestro pasado y están intentando borrar nuestra historia», lamentan.

La comunidad ucraniana y la red de voluntarios agradecen toda la ayuda recibida por los tolosarras e informan que continuará las próximas semanas en San Esteban. La asociación Ucrania-Euskadi ha habilitado una cuenta de ahorro para las personas que quieran colaborar económicamente: ES16 2095 5001 00 9114437029. Concepto: Donación por la paz. Teléfono de contacto: 636 079 690.