Evita percances en vacaciones

Las vacaciones son para desconectar y disfrutar. Y que nada ni nadie nos diga lo contrario. El objetivo es pasarlo lo mejor posible, pero para ello hay que asegurarse de tomar ciertas medidas que nos puedan evitar disgustos. Es cierto que no todo se puede controlar. Sin embargo, hay que asegurarse de que todo lo que dependa de nosotros vaya según lo previsto para que únicamente nos centremos en aprovechar el tiempo como es debido. Aquí van algunos consejos para que tu siguiente viaje o el de este verano salgan de maravilla.

Asegúrate de estar bien cubierto

Todo depende del destino. No es lo mismo viajar a alguna costa del sur de España o al extranjero. Si vas a pasar tus vacaciones en alguna playa de Andalucía o la Costa Brava, por ejemplo, ante cualquier problema de salud la sanidad te atenderá sin tener que realizar nada previamente. Sin embargo, si vas a viajar a Europa, asegúrate de tener vigente tu tarjeta sanitaria europea. O si tienes planeado salir del Viejo Continente, quizás debas plantearte contratar un seguro médico que te cubra un susto que pudiera costarte un ojo de la cara. Lo normal es que no suceda nada durante las vacaciones, pero nunca se sabe. Y hay muchos países que no cuentan con sanidad pública y se aprovechan de turistas para hacerse de oro.

Lo de que una imagen vale más que 1.000 palabras no siempre se cumple

La forma más común de alquilar alojamiento para nuestras salidas suele ser alguna web o portal online a distancia. Poca gente acude ya a una agencia de viajes que cuenta con referencias de otros clientes. Así, no conviene guiarse solo por las imágenes que sube a una determinada web el dueño del alojamiento porque puede que intente engañarnos. Es recomendable leer las opiniones que han aportado antiguos huéspedes de esa habitación o apartamento puesto que su punto de vista es el que más se acercará a la experiencia que buscamos.

Deja el peso sobrante en tierra

Preparar el equipaje no significa hacer una mudanza. Son conceptos diferentes. Los bienes que nos llevemos a nuestro destino tienen que ir acorde al itinerario que hemos planteado. Nunca hay que llevar más de lo necesario porque terminará molestándonos. Así las cosas, no lleves bañador y chancletas a un viaje en el que la principal actividad va a ser visitar monumentos y acumular kilómetros en tus piernas. Sé consecuente a la hora de llenar la maleta.

Cuidado con el sol

Este es un consejo dirigido a todos los viajeros, no solo a los que buscan relajarse en una playa o en una piscina. En esta época del año es cuando más pega el sol y por eso hay que protegerse. La ropa es lo que más nos ayudará a evitar quemarnos y después la crema. Se recomienda esparcir esta unos 30 minutos antes de exponernos a los rayos.

Mantente informado para no meterte en la boca del lobo

La mayoría de los destinos de viajes suelen ser lugares inexplorados para nosotros. Por ello, es recomendable adquirir algún mínimo conocimiento del lugar al que nos dirigimos. En el mundo existen lugares muy inestables social y políticamente, por lo que es un consejo más que útil evitar dirigirnos a un agujero negro durante nuestras vacaciones. Asegúrate de conocer cosas como cuáles pueden ser zonas peligrosas, qué moneda se utiliza en ese lugar, si es fácil conseguir efectivo, si las costumbres locales son parecidas a las de aquí o si se requiere algún código de vestimenta en particular, entre otras cosas.

Que a la vuelta todo esté como debe estar

Y, por último, controla que en tu domicilio no haya peligro de nada. Uno de los momentos en los que se producen más robos en casas es cuando las familias se van de vacaciones. Deja todo cerrado como es debido, sin ningún caramelo a la vista. Avisa a poca gente de tus planes, solo a gente de máxima confianza a poder ser, y que se acerquen a cerciorarse que todo está en orden si es posible de vez en cuando.