Los perceptores de RGI bajan en 3.310 en un año en Euskadi

Los siete meses consecutivos que se han encadenado por debajo de los 50.000 perceptores sitúan las cifras globales de la RGI en unos guarismos similares a los de 2009, el primer año en el que se reconoció este derecho en Euskadi, y son los más bajos desde que Lanbide se hizo cargo de esta prestación en 2012.

El descenso ha sido paulatino desde febrero de 2021, cuando se consolidó la fase de recuperación del empleo tras pandemia de Covid, que en el año recién terminado ha superado los máximos de afiliación a la Seguridad Social. A pesar de esta reducción, Lanbide ofrece cobertura a 9.866 personas más que tienen derecho al Ingreso Mínimo Vital (IMV) pero no a la RGI, gracias a la ventanilla única creada desde que Euskadi asumió la transferencia de dicha prestación.

De esta forma, 2022 ha terminado con 19.794 expedientes que reconocen el derecho al IMV en Euskadi, de los cuales 9.928 pueden complementarla con la RGI. En Gipuzkoa, el número de expedientes que dan acceso al IMV es de 5.306, de los que 2.638 pueden complementarla con la RGI.

A ello se suma que, también en virtud de la transferencia del Gobierno central, Lanbide reconoce el derecho a la Ayuda Para la Infancia (API), el complemento para unidades convivenciales con menores cuyos ingresos, en función del tipo de hogar, sean hasta un 300% de la renta garantizada del IMV, esto es, hasta un máximo de 37.000 euros. Este servicio público tiene reconocido este complemento a 8.488 familias vascas, de las cuales 646 serían APIs «puras», esto es, que no acceden al IMV por no cumplir con los requisitos para esta prestación.

Al cierre provisional del año, los pagos en estas prestaciones han sumado un total de 467,1 millones de euros, de los cuales 302 millones corresponden a RGI (43 menos de los 345 millones presupuestados), 87,5 millones al IMV y 77,6 millones a Prestación Complementaria de Vivienda (PVC), 10 menos de lo previsto para 2022.

Con la entrada del nuevo año, la cuantía base de la RGI se incrementará un 8,5%, hasta que dentro de tres meses entre en vigor la nueva ley del Sistema vasco de Garantía de Ingresos e Inclusión aprobada en el Parlamento Vasco el pasado 22 de diciembre y publicada en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) el 29 de diciembre. La nueva ley prevé que se incorporen personas que ahora no pueden acceder a esta prestación, y el presupuesto para ello es de 565 millones de euros, un 20% más de lo ejecutado este año.

La nueva ley vasca de Garantía de Ingresos e Inclusión pretende proteger sobre todo a las familias con hijos y a los pensionistas. Entre las principales mejoras de la nueva RGI está el aumento de las cuantías para todos los perceptores. Entre otros aspectos, supondrá una subida del 8,5% en las prestaciones, de forma que, con la entrada en vigor de la norma, la cuantía mínima de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) se situará el próximo año en torno a los 800 euros.

En una respuesta parlamentaria reciente, la consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, detallaba que 12.000 ciudadanos vascos llevan 10 años o más cobrando la RGI del total de los cerca de 49.000 que eran titulares en ese momento. Un total de 6.695 vascos cobran este subsidio desde hace más de 13 años y otros 5.248 llevan recibiéndolo desde hace una década, lo que da un total de 11.943 ciudadanos.