Osakidetza abonará 130 millones a 10.165 trabajadores sanitarios en los próximos meses

El Consejo de Administración de Osakidetza acordó este pasado martes desistir del recurso de casación interpuesto contra la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, ratificada por el Supremo el pasado marzo, que daba la razón a los trabajadores. Aquel dictamen obligaba al Gobierno Vasco a restituir ese dinero a los profesionales de la salud, con atrasos incluidos. La decisión ha sido comunicada esta misma mañana a los sindicatos durante el transcurso de la mesa sectorial.

El pago del plus a los trabajadores de Osakidetza es una deuda que arranca en 2012, cuando el lehendakari Patxi López y su consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, realizaron una convocatoria de «desarrollo de la carrera profesional» con el fin de mejorar el nivel y salario de los trabajadores sanitarios.

El Gobierno fijó unas bases que valoraban una serie de méritos y premiaban la antigüedad de 5, 11, 18 ó 25 años. Los sindicatos estimaban que unos 7.000 funcionarios de todas las categorías y escalas superaron las pruebas previstas. Finalmente los empleados con derecho a percibir este complemento, según ha comunicado Osakidetza, se ha elevado a 10.165.

Aquel dinero aprobado hace siete años no llegó a pagarse y el conflicto laboral acabó por judicializarse. La causa denunciada por los sindicatos llegó al Supremo, que el mes pasado falló en contra del Servicio de Salud y ratificó la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco dictada en mayo de 2018.

El mes pasado el Gobierno Vasco decidió pagar en la nómina de abril este complemento con efecto retroactivo a 1 de enero de este año, pero no con efecto desde 2012, lo que fue criticado con los sindicatos, que consideraron la medida insuficiente.

La categoría profesional es un plus que, en función del puesto de trabajo, oscila entre los 1.310 y 11.543 euros brutos al año.

Tras conocerse la decisión de Osakidetza el Sindicato de Enfermería Satse ha mostrado su satisfacción por el hecho de que los trabajadores de la sanidad vasca vayan a cobrar «por fin los atrasos». «Después de siete años de movilizaciones y de medidas judiciales, Osakidetza, por fin, ha recapacitado y cumplirá con su deuda», se ha felicitado la central.

Satse ha reclamado una convocatoria «extraordinaria» para que cada trabajador puedan acceder «al nivel que le corresponda» y para «resolver los efectos colaterales de las personas que no han podido participar en estos años», y ha confiado en que se diseñe «un nuevo modelo de desarrollo profesional, que mejore los factores subjetivos y las desigualdades».