Jóvenes de GKS intentan reventar el acto de apertura de curso de la EHU en Donostia

El inicio del curso académico de la EHU se vio alterado por las protestas de un centenar de jóvenes convocados por Ikasle Abertzaleak que se concentraron con pancartas en favor de Palestina para protestar contra el genocidio. Lo hicieron primero a varios metros de la carpa organizada para celebrar el acto solemne presidido por el lehendakari, pero se aproximaron hasta la misma puerta del recinto una vez que las autoridades estaban dentro, momento en el que creció la tensión y se vivieron forcejeos entre jóvenes y personal de seguridad. La llegada, instantes después, de agentes antidisturbios de la Ertzaintza, alejó la protesta y los jóvenes se disolvieron.

Los manifestantes lanzaron mensajes contra el Gobierno Vasco y la propia EHU, acusándoles de cómplices del genocidio en Palestina. Junto a lemas como «Estatu sionista, estatu terrorista!», «Israel suntsitu, Palestina askatu!», gritaron otros como «Eusko Jaurlaritza, konplize!» o «EHU, konplize».

Los gritos, acompañados por silbidos y abucheos, siguieron la entrada de las autoridades a la carpa. Hasta el legendario portero José Ángel Iribar tuvo que someterse al bochorno, acompañado por el lehendakari Carlos Garaikoetxea. Ambos se miraban atónitos a la cara al pasar delante de la movilización. Los dos recibirían más tarde, junto a Nekane Balluerka, las medallas de oro de la EHU.

Los decibelios alcanzaron su punto álgido una vez que el rector Joxerramon Bengoetxea y el propio lehendakari accedieron a la carpa entre insultos, finalizando la protocolaria entrada, y se sentaron en la mesa presidencial. Los jóvenes manifestantes dieron varios pasos adelante y el acto, previsto para las 11.30 horas, no pudo iniciarse ante el ruido que lo rodeaba. Tras varios minutos de impás, el rector abandonó la mesa y se acercó a los manifestantes, quienes hicieron caso omiso a sus petición de respeto. Instantes después llegó una dotación de antidisturbios de la Ertzaintza, ante lo cual los alborotadores decidieron retroceder en medio del grito de «indar poliziala, kanpusetik kanpora!».

La paradoja del acto tuvo lugar en su inicio, cuando el rector llamó a los presentes a hacer un minuto de silencio por las víctimas del genocidio en Palestina. Silencio que fue precisamente boicoteado por la manifestación organizada para denunciar la actuación del estado de Israel. «Denunciemos el ataque israelí contra Palestina. Llamemos a las cosas por su nombre: por la paz y contra el genocidio», señaló Bengoetxea. Mensaje que no pudieron escuchar los manifestantes.

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