La Fiscalía pide a las familias que entreguen los móviles de los niños para rastrear a los autores
Son ya más de diez la cifra de colegios de Gipuzkoa que han denunciado los foros pornográficos
La Fiscalía de Gipuzkoa ha solicitado a las familias cuyos hijos han sido incluidos en alguno de los dos chats de WhatsApp donde se ... comparten contenidos pornográficos y comentarios vejatorios que entreguen los móviles de los niños y adolescentes para tratar de avanzar con la investigación y así poder dar con los autores o creadores de estos foros en los que se han visto implicados más de mil menores. Según los últimos datos, ya son al menos doce los centros educativos de Gipuzkoa que han denunciado esta situación que ha hecho saltar las alarmas, diez de Donostia, uno en Irun y otro en Lasarte-Oria.
Tras recibir una denuncia por parte de un particular, la Ertzain-tza ya ha iniciado el análisis de un teléfono, al tiempo que continúa insistiendo a las familias para que revisen el contenido de los terminales de sus hijos. En caso de comprobar que están incluidos en alguno de estos dos grupos, la recomendación es no borrar nada y avisar al colegio, que será finalmente el encargado de trasladar toda la información a la Policía vasca. «Es necesario que los padres denuncien y colaboren de forma activa», asegura Mercedes Bautista, teniente fiscal y delegada de Menores y Cooperación Internacional de la Fiscalía de Gipuzkoa. «Si dejan sus móviles con una autorización escrita para que puedan analizar su contenido facilitarán obtener más información sobre las personas que han podido tener una actuación activa e ilícita en los hechos», añade. En palabras de Bautista, «solo así se podrá conocer la envergadura de la situación provocada».
Se trata del mayor caso conocido de estas características en el territorio, según afirman fuentes de la Fiscalía, que ya había tenido constancia de algún precedente de difusión de pornografía infantil a través de grupos de menores en redes, pero nunca de tal magnitud. Jorge Bermúdez, portavoz de la Fiscalía y adscrito al Servicio de Criminalidad informática, señaló a este periódico que la Ertzaintza está recibiendo llamadas «constantemente» y explicó que cuando el atestado esté cerrado será cuando puedan empezar realmente con una investigación que se prevé compleja y larga. «Estos hechos van a requerir de un trabajo de investigación policial arduo, porque si estamos hablando de mil participantes, hay que determinar quién ha hecho qué y quién no», matiza.
«La Ertzaintza está recibiendo llamadas constantemente», aseguran desde la Fiscalía
Recomendaciones
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Salir del grupo y bloquear a la persona que te ha agregado. También se puede reportar en la plataforma correspondiente el propio grupo o los mensajes, además del usuario que les haya añadido.
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No difundir las imágenes ni mensajes que se han recibido en el móvil, ya que podrían constituir un delito.
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No borrar el contenido del grupo. Podría servir de prueba incriminatoria y ayudar en la investigación policial para dar con sus autores.
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Denunciar los hechos ante la policía o la Ertzaintza lo antes posible.
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Prevención WhatsApp permite elegir quién te puede añadir a un grupo. Para configurar esta opción deberás abrir los ajustes y entrar en el apartado 'cuenta'. Después, en el subapartado 'privacidad' y a continuación se podrá configurar en la opción llamada 'grupos'.
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Responsables. Los padres o tutores responden civilmente por los daños de los menores.
La forma de actuar es por invitación; una vez que consiguen que un menor se quede le piden que invite a todos sus conocidos para hacer más grande los grupos, cuyos nombres no dejan lugar a dudas: 'Meter gente hasta llegar a un millón' y 'Meter gente hasta que te hagas famoso'. Este último chat fue creado el 11 de noviembre y desde hace dos semanas circula por los teléfonos móviles de los menores. El contenido de lo que se ha difundido a través de ellos va desde la pornografía hasta la homofobia, con insultos sexistas, comentarios vejatorios e incluso proclamas políticas.
La voz de alarma la dio el martes Aldapeta Maria Ikastetxea después de que el viernes pasado recibiera una notificación de una madre cuyo hijo había sido incluido en uno de los grupos y, dado el contenido «altamente desagradable» del mismo, se puso en contacto con el centro educativo. Tras buscar información entre sus propios alumnos, el centro donostiarra comprobó que había 200 alumnos que habían participado en los grupos. Alertados, se pusieron en contacto con la Ertzaintza y enviaron una carta a las familias desde 5º de Primaria (11 años) para comunicarles de la existencia de los foros y de la dureza de su contenido. Fue el primer centro en poner una denuncia. Después, los responsables de Deutsche Schule San Alberto Magno hicieron lo propio. Mientras tanto, continúan las indagaciones.
El escándalo de los chats con contenido pornográfico se extiende a un colegio de Vitoria
El caso de los dos chats de WhatsApp con menores en los que se comparte contenido pornográfico y comentarios vejatorios, además de proclamas franquistas entre otros mensajes «altamente desagradables» ha llegado a Vitoria.
La dirección del IES Lakua BHI ha enviado una circular a las familias advirtiendo de que «varios» alumnos están incluidos en los preocupantes chats. Serían, al menos, tres los afectados. «Por medio de este mensaje os informamos de que nos hemos dado cuenta de que los móviles de varios alumnos se encuentran dentro de las listas de chat de contenido inadecuado que vienen apareciendo en los medios de comunicación en los últimos días. Os informamos de ello para que podáis gestionarlo lo más adecuadamente posible», se puede leer en el aviso.
Los casos que se han detectado en la capital alavesa afectarían a estudiantes de 1º y 2º de ESO (entre 12 y 13 años). «El primer aviso lo dio una familia antes de que el tema saliera a la luz en prensa. Después una tutora nos informó de otro caso que había en su clase y luego tuvimos conocimiento de un tercero», detallan desde la dirección de estudios. En las conversaciones en las que estaban agregados habría contenido pornográfico pero también «mensajes neonazis».
Esta situación preocupa a la dirección del instituto público vitoriano, que va a poner en conocimiento de la Ertzaintza toda la información con la que cuenta. «Estamos hablando de chats de WhatsApp, una aplicación para la que la edad mínima es de 16 años. Nos procupa que puedan ocurrir estas cosas y que el acceso a la tecnología no se controle por parte de las familias y se nos haga responsables a los centros», profundizan desde el instituto.
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