El 90% de los aspirantes suspende la OPE de la Ertzaintza, que deja sin cubrir 270 plazas
El Departamento de Seguridad convoca de urgencia una promoción extraordinaria tras los 2.800 suspensos
La última OPE conjunta de la Ertzaintza y las policías locales de Euskadi ha provocado un problema inédito al Departamento de Seguridad del Gobierno vasco. Por primera vez, el número de aspirantes aprobados tras las pruebas teóricas y psicotécnicas (380 de 3.609) que se realizaron hace unas semanas en el BEC de Barakaldo es inferior al número de plazas de funcionarios que se ofertaban (650), según ha podido saber este periódico. Se trata de un serio contratiempo para el Ejecutivo autonómico –en la medida en que agudiza los problemas de personal de la Ertzaintza y su objetivo de llegar en 2030 a los 8.000 agentes– y que incluso ha obligado a programar, a petición de los sindicatos, una oferta de empleo extraordinaria que la academia de Arkaute convocará el próximo otoño.
A esta oferta de empleo conjunta de la Ertzaintza y 25 municipios vascos se presentaron 3.609 personas (otro millar que había pagado la inscripción no acudió al examen del BEC) con el objetivo de hacerse con alguna de las 650 plazas de funcionario que había en juego. Se trata de la OPE más grande desde la pandemia: 473 plazas eran para la 34 promoción de la Policía autonómica y 177 para ser agentes locales.
La primera gran criba se produjo en la prueba psicotécnica. Muchos aspirantes se preparan durante meses en academias especializadas, que les van guiando en todas las fases del proceso selectivo. Según varios opositores, el núcleo del asunto fue que esta prueba sufrió «cambios significativos» respecto a otros años para los que no muchos alumnos estaban preparados. Los resultados fueron contundentes. De las 3.609 personas que se enfrentaron a este examen sólo lo superaron unas 300. Es decir, menos del 10% del total. «Había preguntas sin respuesta posible y otras con doble respuesta», insiste un opositor. Además, se les dio menos tiempo del habitual para completar este test.
Tras rebajar la nota de corte, sólo superaron la primera fase 380 de los 3.609 aspirantes
Esta situación obligó en un primer momento a reducir las notas de corte generales (una opción que se encuentra recogida en las bases), lo que se tradujo en que el número de personas que aprobaron la parte psicotécnica se quedó en unas 700. Sin embargo, dentro de este grupo también se produjeron suspensos en el examen teórico. Todas las pruebas son eliminatorias y finalmente el número de aptos se redujo hasta los 380 aspirantes. En otras palabras, el porcentaje de suspensos rondó el 90%.
Oposiciones anteriores
Los que han superado estas fases se enfrentarán después del verano a los test físicos, las entrevistas personales y los controles médicos. En estas partes del proceso selectivo suelen suspender bastantes opositores, lo que hace pensar que el número final de aprobados será todavía inferior.
Se trata de una situación inédita en la Ertzaintza. En otras oposiciones se han llegado a dar en torno al 50% y el 60% de suspensos en estas etapas iniciales. En 2022, aprobaron el psicotécnico 1.400 alumnos del total de los 3.500 presentados, una cifra similar a la que se dio en 2024. En la OPE de 2021 el número de suspensos se redujo a un 30% y en oposiciones anteriores este porcentaje osciló entre el 4% y el 45%.
La mayor parte de los suspensos se centró en el test psicotécnico, que había sido modificado
Lo que no se había producido nunca era que los aprobados no llegasen a cubrir el número de plazas ofertadas. En 2019 quedaron vacantes 35 puestos de los 700 disponibles. Pero ocurrió al final del proceso selectivo, tras las pruebas físicas y las entrevistas personales, en las que se suelen producir numerosos suspensos. «Lo habitual es que a las últimas fases de la OPE lleguen muchos más aspirantes que plazas en juego», insisten fuentes conocedoras de estos procesos.
«Ahora se ve a gente muy joven o que no están bien preparados», apuntan diferentes fuentes
¿Cómo es posible que se hayan dado los resultados de esta última OPE? Obedece a varias razones. Muchos aspirantes apuntan al cambio en los modelos de las pruebas psicotécnicas, totalmente distintos a los que habían trabajado en los últimos meses. También se ha producido cierta polémica entre las academias que se dedican a formar a los aspirantes y acusaciones veladas de supuestos tratos de favor. Pero hay otras fuentes que también apuntan a que llevamos años de grandes OPE, de cerca de 800 plazas, en el contexto del proceso de renovación generacional en el que está inmersa todavía hoy la Ertzaintza. En este sentido, los mismos medios apuntan que muchas de las personas que llevaban tiempo preparándose ya han entrado a la Policía vasca en los últimos años, lo que ha reducido «de forma significativa» la bolsa de candidatos. «Ahora se ve mucha gente muy joven o que no están bien preparados», apuntan los mismos medios.
Los aspirantes volverán a dormir en Arkaute
Además de ser la primera OPE en la que se produce un suspenso masivo en la fase inicial, esta sexta oferta de empleo conjunta llega con dos novedades importantes. Para empezar, se recupera el régimen de internado para los aspirantes. Los que superen las pruebas convivirán ocho meses en Arkaute, cuyas instalaciones serán reformadas para poder acoger a más de 700 alumnos. La última promoción que pernoctó allí fue la 27, que terminó el curso en el año 2019. Según esta previsión, la formación en Arkaute comenzará a principios de 2026 y el periodo de prácticas arrancará a finales del próximo año.
El curso será algo más corto, pero más intenso: las clases serán de mañana y tarde. Según las fuentes consultadas por este diario, uno de los principales motivos que han llevado a tomar esta decisión es que la convivencia potencia los lazos entre los aspirantes y, además, permite tener más herramientas de cara a la selección final. Entre otras cosas, permite identificar más rasgos de las personas (sobre todo su capacidad de trabajar y convivir en equipo) que las jornadas de formación de 8 horas en las que los alumnos se marchan a sus casas a dormir. Según el Departamento de Seguridad, el internado sirve para «fomentar la cohesión, el conocimiento y la colaboración entre ertzainas y policías locales». Otra novedad importante será que, por primera vez, todos los aspirantes podrán elegir entre euskera y castellano a la hora de realizar las pruebas de selección.
La sexta OPE conjunta de Ertzaintza y Policías locales ha sido convocada en un momento en el que muchos municipios gobernados por EH Bildu prefieren organizar sus propias OPEs en medio del conflicto político por los «modelos policiales». En esta ocasión, han sido cuatro de 22 los consistorios gobernados por la izquierda abertzale (con 7 de 177 plazas) que se han unido a esta convocatoria. Los responsables del Gobierno vasco y de los municipios regidos por PNV y PSE insisten en las bondades de este sistema, que empezó a desarrollarse en 2012. Apuntan a que no responde sólo a cuestiones de «eficiencia» de recursos y de unificación de criterios y formación.