Se necesitan 2.000 donostiarras de entre 60 y 85 años para un estudio sobre la prevención del alzhéimer
Un 30-40% de la población guipuzcoana tiene índices de riesgo de demencia elevados, pero los expertos aseguran que 1 de cada 3 casos es prevenible
Se necesitan 2.000 donostiarras de entre 60 y 85 años para formar parte de un estudio sobre la prevención del alzhéimer liderado por la ... fundación CITA-alzhéimer. De esta forma, la capital guipuzcoana sigue los pasos de otros municipios como Deba o Beasain, si bien en la investigación participan también personas de Irun y diferentes localidades de Vizcaya, Navarra e incluso La Rioja. Esta enfermedad, así como otras formas de deterioro cognitivo y demencia, constituyen uno de los principales retos que plantea el cambio demográfico y el envejecimiento de la población, pero se puede prevenir si se siguen unos hábitos de vida saludables y se controlan los factores de riesgo cardiovascular.
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De lo contrario, el número de personas dependientes por demencia se habrá duplicado o incluso triplicado en los próximos 20-30 años. Así lo corrobora el doctor Pablo Martínez Lage, director científico de CITA-alzhéimer, fundación dedicada desde hace años a la investigación y prevención del deterioro cognitivo.
Según él, actualmente un 30-40% de la población guipuzcoana tiene índices de riesgo elevados de demencia, pero los expertos aseguran que 1 de cada 3 casos son prevenibles si se consigue identificar a tiempo a las personas que están en calidad de riesgo. Es por ello que se solicita a las y los donostiarras que estén en esa franja de edad que se apunten al estudio a través de la página web www.cita-alzheimer.org o llamando al 943 021 792. A todos ellos se les solicitará cumplimentar un cuestionario, pero solo una cuarta parte será seleccionada, ya que el resto quedará fuera por no tener un riesgo elevado de padecer alzhéimer.
Las mujeres y hombres seleccionados para formar parte de la investigación serán citados mediante correo electrónico o vía telefónica para una visita inicial explicativa. A partir de ahí, y de manera aleatoria, la mitad de los participantes seguirán por su cuenta dichas pautas y tendrán visitas médicas completas al año y a los dos años de comenzar el proyecto, del que prevén sacar conclusiones para finales de 2025 o principios de 2026.
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La otra mitad, por su parte, entrará en un programa de dos años de duración en el que asistirán a visitas médicas cuatrimestrales de forma individual así como a talleres para fomentar la estimulación cognitiva, controlar los factores de riesgo cardiovascular, mejorar los hábitos nutricionales, promover la actividad física y mejorar la inteligencia emocional y la salud psicosocial. Al término de las mismas, se realizará una nueva visita para evaluar la evolución.
El estudio denominado 'CITA GO-ON' contará con la participación de CITA-alzhéimer, la UPV/EHU, el Basque Culinary Center, la Universidad Pública de Navarra, el Instituto Vasco de Neurociencias Achúcarro, el Instituto Biodonostia y Camp Tecnológico además de tener el apoyo y reconocimiento del prestigioso Insitituto Karolinska de Suecia, referente mundial en neurociencia. La investigación, enmarcada dentro de una iniciativa europea y mundial, se suma así a proyectos similares desarrollados en Estados Unidos, América Latina, China y Singapur.
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Hábitos de vida saludable
El objetivo de este reto es demostrar que la intervención y el control de factores de riesgo, así como la promoción de hábitos saludables como el ejercicio físico, el entrenamiento cognitivo, seguir una dieta saludable y combatir situaciones socioemocionales (ansiedad, depresión, soledad, estrés...) son eficaces para prevenir el alzhéimer. Para ello, se necesitan 2.000 donostiarras 'inolvidables' de entre 60 y 85 años para este estudio sobre la prevención de una enfermedad de la que no se sabe la causa pero sí que es un proceso de origen multifactorial.
El hecho de que una persona desarrolle deterioro cognitivo, demencia y, en definitiva, alzhéimer, depende de muchos factores de riesgo y protectores que actúan a lo largo de la vida. Buena parte de estos factores son modificables, susceptibles de intervención, y se pueden cambiar para reducir el riesgo, aseguran los expertos. Pero para ello, el primer paso es identificar a las personas que están en situación de riesgo, que tienen riesgo aumentado.
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Personas, por ejemplo, con hipertensión, colesterol, diabetes, obesidad... aunque hay otros factores a los que quizá se les preste menos atención, más bien protectores, como pueden ser la actividad física, la intelectual, el seguir una dieta saludable, el combatir situaciones socioemocionales en el rango de la ansiedad, la depresión, la soledad, el estrés o la gestión de las emociones. «Factores sobre los que se puede intervenir para reducir ese riesgo y, por tanto, prevenir la demencia», recalca Martínez Lage.
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