Donostia rinde tributo a la última corporación electa de Altza
El alcalde, Eneko Goia, ha destacado la labor que desarrollaron «por los caminos de la libertad en pro del bien común de sus vecinos»
El Ayuntamiento de San Sebastián ha homenajeado este sábado a la corporación municipal constituida en Altza en 1931 en su labor de recuperación de la memoria histórica de la ciudad.
El alcalde, Eneko Goia, ha declarado que «este acto es un reconocimiento tanto del Ayuntamiento como del pueblo altzatarra a la última corporación electa de Altza por la labor desarrollada por los caminos de la libertad en pro del bien común de sus vecinos».
El acto en homenaje a la corporación municipal constituida en Altza durante la II República (1931-1937), que se ha llevado a cabo a iniciativa de la Junta del Distrito Este, ha tenido lugar en la Tenencia de Alcaldía de Altza, donde se ha descubierto una placa en memoria de los 12 miembros de aquella última corporación democrática antes de la anexión de la villa a San Sebastián en 1940.
📸 Donostiako Udalak Altzan 1931n eratutako Udalbatza omendu du gaur goizean, hiriko oroimen historikoa berreskuratzeko lanarekin jarraituz. Este acto tiene como objetivo reparar la humillación y el dolor que padecieron.#Donostia #SanSebastian pic.twitter.com/vJ1DTRejv4
Eneko Goia (@EnekoGoia) September 11, 2021
Durante el homenaje, han recibido una lámina conmemorativa los familiares de Celestino Atorrasagasti, Pedro Ayesta, Gaspar Cardona, José Casares, Juan Iriarte, José Iruretagoyena, José Juanes, Pablo Landa, Ricardo Tejada y Felipe Zurutuza, integrantes de aquella corporación.
En el acto han estado presentes además representantes de los grupos políticos del consistorio donostiarra, vocales de la Junta del Distrito Este y familiares de los miembros de la corporación homenajeada.
Goia ha subrayado que con gestos de reconocimiento público como este, el Ayuntamiento pretende «sacar del olvido su historia y dar a conocer a las personas que sufrieron las consecuencias de la Guerra Civil y la posterior dictadura franquista, con la intención de reparar la humillación y el dolor que padecieron».