Todos los grupos políticos apuestan por habilitar nuevos parkings disuasorios

Los atascos y los cortes de tráfico puestos en marcha este verano se debatieron en una moción de control presentada por la coalición soberanista, que no dejó pasar la oportunidad de subrayar los nuevos problemas que están causando las retenciones provocadas por esos cierres.

La concejala de EH Bildu Garbiñe Alkiza señaló que los cortes de tráfico cuando los parkings están llenos «están generando problemas sobre todo en Ategorrieta y en el entorno de Pío XII», pero también en Bidebieta y Egia, unas retenciones que están afectando al transporte público, que «queda atascado en esos lugares».

«El 20 de julio hubo hora y media de colapso en la ciudad, con el Centro cerrado al tráfico», añadió Alkiza. La edil lamentó, por otra parte, que Illunbe solo se utilice para los meses de verano y urgió al gobierno municipal a la creación de más parkings disuasorios. «Los actuales deben reforzarse y además hay que buscar nuevas alternativas».

La coalición propuso en su moción que se utilice el parking foral de Aritzeta (305 plazas), junto a la A-8, en el término municipal de Usurbil, como parking disuasorio aprovechable para las necesidades de Donostia. En la actualidad, este parking es utilizado fundamentalmente por personas del entorno de Donostia que se trasladan a otras partes de Euskadi a trabajar y lo que hacen es dejar ahí su coche para compartir el viaje en un solo vehículo hasta el destino.

La nueva concejala de Movilidad, Olatz Yarza (PNV), indicó que las soluciones para evitar los embotellamientos de tráfico «no son sencillas». Recordó el carácter «intermitente» de los cortes de acceso al Centro por la falta momentánea de plazas en los parkings y explicó que en cuanto se libera espacio se vuelve a permitir la circulación. Rechazó que las medidas puestas en marcha este verano sean «improvisadas», como dio a entender EH Bildu, dado que las razones de estos cortes son unas obras del Topo que se sabía se tenían que realizar. Apuntó, no obstante, que antes de que se realizaran las obras de la pasante ferroviaria ya había problemas de congestión durante los meses de verano por la avalancha de visitantes que recibe la ciudad.

La concejala jeltzale afirmó que «estamos buscando las mejores soluciones posibles» y matizó que el parking de Aritzeta, al estar fuera del término municipal, solo puede ser servido por un transporte interurbano, no por Dbus, lo que complica las virtualidades que podría tener para la ciudad. No obstante, no lo descartó del todo como opción futura: «Hablaremos con Diputación», aseguró.

El portavoz del PP, Borja Corominas, señaló que en 2019 todos los grupos del Pleno rechazaron una moción de su partido que reclamaba parkings disuasorios. «Hace cuatro años esto era ya una necesidad, pero durante la última legislatura solo nosotros hemos defendido esta posición. Votaremos a favor de la moción de EH Bildu porque la ciudad necesita de nuevos parkings en la periferia urbana».

El portavoz de Elkarrekin Podemos, Víctor Lasa, se sumó a esta necesidad como fórmula para evitar que los vehículos entren hasta el Centro: «Creemos que al Ayuntamiento le hace falta más proactividad, tener ideas claras. Soy partidario de los cortes de tráfico que se hacen este verano cuando los parkings están llenos, pero los barrios de alrededor sufren con estas medidas». La de este verano es «una solución temporal», según Lasa, pero no una definitiva. Consideró que el gobierno municipal tiene que «desincentivar el llegar en coche a San Sebastián. Animemos al visitante a dejar el coche en casa. ¡Venga sin coche!», concluyó, como si de un lema turístico se tratara.

La moción que se aprobó por unanimidad dice así: «El Pleno insta al gobierno municipal a realizar un análisis de la inversión y de los recursos que se necesitarían para conectar el aparcamiento de Aritzeta con San Sebastián» y le insta a «reforzar el aparcamiento disuasorio de Illunbe, adoptando las medidas necesarias para que se utilice durante más tiempo que en la actualidad (del 8 de julio al 10 de septiembre), a la vez que se mejora la señalética de acceso».

El Pleno rechazó con los votos en contra del gobierno municipal PNV-PSE, el apoyo del PP y la abstención de EH Bildu una moción de Elkarrekin Podemos para que se convocase una consulta popular sobre la construcción del GOe, el segundo edificio del Basque Culinary Center (BCC), en Manteo. El portavoz del grupo proponente, Víctor Lasa, apoyó el proyecto pero no su ubicación que, como el PP, la planteó en barrios que aprovecharían mejor esa inversión, como pudiera ser la zona de Herrera-Txingurri. El alcalde, Eneko Goia, recordó que nadie se opuso cuando se cedió la parcela para el primer edificio del BCC en un operación semejante, ni se cuestionó en el PGOU que esa parcela fuera destinada a equipamiento, por lo que dejaría de ser zona verde. Opinó que la consulta podría sentar un mal precedente para cualquier cuestión urbanística.

El PP llevó una moción sobre la supresión del microbús a Urgull este verano para dar servicio de forma temporal al barrio de Atotxa Erreka. El concejal popular Jorge Mota criticó ambas medidas, tanto la transitoriedad del servicio al nuevo barrio como la eliminación del bus al castillo de la Mota, y su moción fue apoyada por la oposición. La concejala de Movilidad, Olatz Yarza, aseguró que el servicio de Atotxa Erreka tendrá continuidad tras el verano, pero no se comprometió con la vuelta de un transporte de ocio a Urgull.

EH Bildu llevó al Pleno la prohibición de realizar a partir de 2024 comidas populares en espacios ajenos al calendario festivo municipal, decisión adoptada ante la imposibilidad de dar respuesta a todas las peticiones que llegan al Ayuntamiento. El concejal de Mantenimiento y Servicios Urbanos, Carlos García, señaló que se había tratado de un error de «comunicación» de su departamento y afirmó que la medida será suspendida. Todos los grupos votaron a favor de la moción de EH Bildu.

EH Bildu llevó este jueves el debate sobre la vivienda al Pleno y logró sacar adelante una moción de control por la que se insta al gobierno municipal a «dar los pasos necesarios para la declaración de Donostia como zona de mercado residencial tensionado por la administración competente para ello». También se acordó la implementación de las medidas de la nueva Ley de Vivienda «para garantizar este derecho» y la realización de un estudio que permita cuantificar los «grandes tenedores». Este estudio tendrá en cuenta a las personas físicas o jurídicas que sean titulares de cinco o más inmuebles residenciales en el municipio.

La moción se aprobó con los votos favorables de todos los partidos excepto el PP, que se opuso. A juicio de la coalición aber-tzale, esta iniciativa «deja en evidencia las contradicciones del PNV puesto que la ha apoyado justo un día después de que el Gobierno Vasco, con la objeción de los consejeros del PSE, socio del Ejecutivo, recurriera la ley ante el Tribunal Constitucional».

«No están actuando ni de manera consecuente ni de manera responsable con el problema que más afecta a la ciudadanía donostiarra», señaló el concejal Ricardo Burutaran.

La contratación de nueve agentes de la Guardia Municipal salió adelante con el apoyo unánime del Pleno, para lo que ya existe una partida presupuestaria aprobada en el presente ejercicio. EH Bildu y PP coincidieron en señalar que este refuerzo de la plantilla es «insuficiente» para mantener la calidad del servicio ante el aumento de la delincuencia registrado en los últimos años. La coalición abertzale solicitó además la creación de una «bolsa propia de agentes que conozcan la realidad de Donostia».

El Pleno aprobó ayer una propuesta del gobierno municipal para «excluir la obligación» de ser funcionario o empleado público para ocupar las direcciones de Salud y Medio Ambiente y Gestión de Personas, en la actualidad vacantes. Esta posibilidad «está recogida en la ley», según explicó el concejal de Personas y Gestión Económica y Presupuestaria, Kerman Orbegozo, quien advirtió de que no se trata de una «decisión arbitraria» ni de un «nombramiento definitivo», sino de abrir la puerta a «otros perfiles».

Tanto EH Bildu como Elkarrekin Podemos criticaron la medida, ya que a su juicio supone «la confirmación de que el gobierno municipal no cree ni defiende el sistema público» y pretende «meter por la puerta de atrás a personas concretas», lo que calificaron de «muy grave» y «un escándalo», al tiempo que recordaron que una medida de este tipo solo debería adoptarse con carácter «excepcional».

La iniciativa salió adelante con los votos favorables de la coalición de gobierno PNV-PSE y del PP, que subrayó no tener «inconveniente en que los mejores ocupen estos puestos, sean o no funcionarios». Por su parte, los grupos progresistas de la oposición votaron en contra.

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