Varios autobuses prueban la nueva estación de Atotxa
Se prevé que esté inaugurada a mediados de enero, aunque desde ayer ya se puede utilizar el parking
ANA VOZMEDIANO/AINHOA MÚGICA
Viernes, 18 de diciembre 2015, 14:57
Los primeros autobuses han probado este viernes la nueva estación donostiarra, aunque de momento sin viajeros. La Diputación de Gipuzkoa ha realizado un simulacro con diez autobuses de diferentes dimensiones para comprobar la operatividad de la nueva instalación. La diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio, Marisol Garmendia ha explicado que han aprovechado las horas punta de la mañana "para testar los recorridos, los tiempos". "Eran pruebas absolutamente necesarias, para ver las entradas y las salidas", ha explicado.
La nueva estación de autobuses de Donostia retrasa de nuevo el día de su puesta en marcha. Pese a que se barajaron diferentes fechas de inauguración, la última de ellas antes de fin de año, no será al menos hasta mediados de enero cuando los autobuses y los viajeros utilicen estas instalaciones de Atotxa situadas junto a la estación ferroviaria.
La estación contará con 21 dársenas a las que solo tendrán acceso los viajeros, el modelo habitual de los aeropuertos, así como los autobuses que vayan a recoger pasaje o a dejarlo. No pueden quedarse estacionados, se ha matizado más de una vez, "porque esto es no es un garaje". Quiosco, puesto de venta de lotería y una cafetería son parte de la oferta. Puede ser que estos locales se abran antes de que la estación empiece a funcionar.
Ha costado 27 millones de euros, de los que algo más de 14 han sido financiados por Diputación y Ayuntamiento. La entidad foral, además, deberá pagar 600.000 euros anuales, según figura en el convenio firmado en su día por el entonces alcalde de Donostia, Odón Elorza, y el diputado general, Markel Olano. Con esa cantidad, se pretende compensar a la empresa gestora por el uso que harán las líneas interurbanas de Lurraldebus que también depositarán en la estación a sus pasajeros. El resto ha sido sufragado por la UTE formada por la constructora Murias y por Transitia, que se va a encargar de la gestión del parking y de la estación.