La Real Sociedad no quiere un trago con sobresaltos en Zamora
Vuelve, con otro poso y condición, al Ruta de la Plata de Zamora donde cayó eliminada hace 16 años, sin Silva ni Merino aún renqueantes
La Real quiere tomarse su segundo trago copero de esta temporada con tranquilidad y sin sobresaltos. Para ello debe derrotar esta tarde (19.00 horas, ... Dazn) al Zamora, penúltimo clasificado de la Primera RFEF–misma categoría donde milita el Real Unión– en el conocido Ruta de la Plata. Existe un choque generacional claro que quiere solventar la escuadra de Imanol. La Real ganó la Copa el año pasado, aunque en el almanaque saldrá como si hubiera sido en 2020, y la pasada campaña cayó ante el Betis en la prórroga después de que se unieran la mala fortuna y un calamitoso arbitraje. Es decir, que la escuadra txuri-urdin ha dado un paso adelante sobre cómo debe afrontar partidos coperos. Viajar hasta la capital zamorana retrotrae en el tiempo al aficionado blanquiazul, ya que en el Ruta de la Plata se vivió uno de esos episodios, que no fueron pocos a lo largo de un par de décadas, donde la Real no estaba a la altura de su categoría y caía inexorablemente a las primeras de cambio en el torneo del KO.
Atendiendo a las palabras de Imanol Alguacil parece que ese tipo de episodios están olvidados aunque como bien dice el oriotarra «puedes perder» contra cualquier equipo. Fútbol es fútbol, que diría Boskov. Sin embargo, viendo el posible once que puede presentar la escuadra blanquiazul y cómo se ha comportado desde que el oriotarra dirige la nave, cada vez el factor sorpresa en la Copa es mucho menor.
El equipo blanquiazul quiere solventar este segundo paso, ya que en la siguiente ronda –partidos que estarán fijados para el 5 o 6 de enero– podría verselas caras con equipos de Primera y volverá a ser a partido único que podría ser incluso en Anoeta.
Once de garantías
Imanol se lleva hasta la capital zamorana a 22 futbolistas donde no están ni David Silva ni Mikel Merino. Parece que el choque liguero del próximo sábado contra el Villarreal puede ser el partido donde el canario y el pamplonés vuelvan a la lista y dejen atrás sus problemas físicos. El once que podría poner en liza el oriotarra es del todo de garantías y ahí estriba gran parte de las opciones de que solvente el partido ante un equipo de dos categorías menos.
En la convocatoria txuri-urdin hay dos inclusiones del filial –Beñat Turrientes y Näis Djouahra, quien anotó con el Panadería Pulido su primer tanto con el primer equipo– y vuelven a estar en la lista Asier Illarramendi y Jon Guridi. Puede que el azpeitiarra vuelva a tener minutos y no es descartable que el capitán actúe en algún momento del encuentro. Illarra no se viste de corto en partido oficial desde el 16 de mayo pasado cuando se lesionó en su tobillo ante el Valladolid. Ver en acción al mutrikuarra y al azpeitiarra son algunos de los alicientes de un partido donde Maty Ryan apunta a volver a la portería realista. Varios de los que no jugaron de inicio ante el Betis o que ni tan siquiera saltaron al césped como Gorosabel, Rico, Pacheco, Guevara o Sorloth tendrán su oportunidad de jugar y también deberá completar el equipo con varios titulares, habida cuenta de la baja de Barrenetxea. El donostiarra sufrió un golpe en el entrenamiento del lunes y el oriotarra prefiere preservarlo. Quien sí está en la lista es Igor Zubeldia, a pesar de que ayer no se ejercitó en Zubieta.
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