Héctor Moreno: «Nos viene bien que nos haya tocado el Betis para mantener la exigencia alta y llegar lejos»
Jugador de la Real Sociedad ·
Dice que en el vestuario tienen «la ilusión de poder ganar los dos partidos que quedan antes de Navidad», el de mañana ante el Getafe y el derbi ante el Alavés en AnoetaHéctor Moreno (Culiacán, México, 1988) vive días de vino y rosas. El mexicano se muestra «muy feliz» de que Garitano vuelva a contar con él. ... En cualquier caso, reconoce que el equipo «no está del todo contento después de las dos derrotas consecutivas en Liga» y confía en volver mañana a la senda de la victoria en Getafe.
- Les ha tocado el Betis en la Copa. ¿Qué le dice el rival?
- Es uno de los más complicados que nos podía tocar, equipo que compite en Europa y que ha demostrado tener una clara y ofensiva idea de juego. Les conocemos del último enfrentamiento que tuvimos hace bien poco, merecimos mejor fortuna en aquella ocasión e iremos a por todas.
- Será un mes de enero exigente y un comienzo de año con dos salidas muy complicadas.
- Santiago Bernabeú y Benito Villamarín en apenas unos días. No habrá que relajarse mucho en las vacaciones ya que habrá que estar superenchufado desde principios de año. El equipo ha estado muy fuerte fuera de casa y habrá que seguir así para luego sentenciar la eliminatoria en casa con nuestra afición.
- ¿Se ve con opciones de pasar?
- Si quieres llegar lejos en la Copa tarde o temprano te enfrentas a los mejores. En nuestro caso el sorteo no nos ha dado tregua y nos ha puesto grandes equipos desde la primera ronda. Nos viene bien para poder mantener la exigencia alta para llegar lejos en esta competición. Aspiro a llegar a la final.
- ¿Cómo está el equipo después de haber perdido la oportunidad de dar un salto en la tabla al perder ante el Betis y Valladolid?
- No estamos contentos. Eliminar al Celta en la Copa nos dio moral, pero luego en los dos partidos de Liga debimos haber rascado algún punto más. Estamos ocupados en mejorar y ser capaces de darle la vuelta.
«Ahora que estamos sólidos atrás, tenemos que empezar a concretar y terminar los partidos»
- ¿Se está viendo el juego que quiere Garitano o todavía falta un poco?
- Seguramente aún falte. Hay que encontrar el equilibrio. En el inicio de la Liga el equipo estaba muy bien arriba y abajo nos costó más, encajamos muchos goles. Ahora es al revés. Estamos más sólidos defensivamente y arriba nos está costando marcar. Tenemos que lograr el equilibrio que quiere Asier lo más rápido posible. El equipo ha dado pasos al frente, se ha visto capaz y se ha creído protagonista en los últimos partidos, siendo capaz de tener el balón. También hemos generado más oportunidades y ahora tenemos que empezar a concretar y terminar los partidos.
- ¿Con qué partido de la Real de esta temporada se queda?
- Va por momentos. No ha habido un partido donde crea que hayamos jugado redondo, pero sí ha habido ratos en todos los encuentros donde el equipo ha hecho las cosas de muy buena manera. Dominamos al Betis por momentos, también al Celta, con sus grandes jugadores, y al Valladolid. Es cierto que los goles que nos marcan son errores muy corregibles, difícilmente volverán a ocurrir. Me encantaría tenerlo mañana y así poder decir que el equipo está haciendo lo que busca el míster.
- ¿Y cómo está usted tras haber vuelto al once?
- Muy feliz de jugar. Ahora me toca apoyar al equipo desde dentro del campo, pero cuando no estaba jugando me sentía igual de importante. Muchas veces somos demasiado ególatras y creemos que solo podemos ser influyentes cuando estamos dentro del campo, y no es así. Cuando no te toca jugar tienes que ser igual de positivo y entrenar de la misma forma para que el equipo se prepare de la mejor manera. Además, la persona que estaba jugando en mi lugar seguramente también se lo merecía.
- Lo que no podría imaginar es que su compañero en el eje de la defensa iba a ser Le Normand.
- No. Cuando Raúl se lesionó y me preguntaron en rueda de prensa sobre si la competencia iba a bajar, hablé de él. Era un chico que venía trabajando muy bien desde la pretemporada. Robin ha aprovechado la oportunidad de la mejor manera. Si lo ves entrenar, sabes que aunque un día se equivoque no será por tensión ni por falta de calidad, sino porque cualquiera puede fallar. Entrena como juega. Vive intensamente el entrenamiento y eso le facilita las cosas.
«A Le Normad le digo que es muy bueno, que se lo tiene que creer y que disfrute»
- El otro día Le Normand dijo que usted le da consejos cuando está en el campo. ¿Qué le suele decir?
- Intento estar conectado en el partido. Lo hago más por mí, por el hecho de comunicarme con el que tengo al lado. Robin es joven y necesita que le apoyes pero, insisto, hablar me ayuda más a mí, a estar conectado y anticiparme a las jugadas. Intento darle confianza. Le digo que es muy bueno, que se lo tiene que creer y que disfrute. A un jugador como él hay poca cosa que decirle.
- ¿Qué destaca de él?
- La capacidad de concentración que tiene es impresionante. También su personalidad. Cuando yo era un jugador como él, no me atrevía a hablarle a quien tuviera al lado como él me habla o me grita. Me parece perfecta su actitud. Es más, me ayuda.
- ¿Cómo se siente en el papel de veterano en un vestuario tan joven?
- Cómodo. Este tipo de cambio generacional lo inicié en la selección. Se va gente con peso y los compañeros te ven como el que más experiencia tiene, pero me lo tomo bien. En este club, además, es fácil. Los jóvenes son trabajadores y humildes.
- ¿Cómo es jugar al lado de Theo?
- A mí me gusta jugar con gente que busque y quiera la pelota y Theo tiene esa personalidad.
- ¿Qué les pasa a Sandro y Willian José? Les está costando marcar.
- Esto va por rachas. Antes, con una jugada, metíamos dos goles. Ahora, generamos diez y, si eso, entra una. En cuanto encuentren la portería, llegarán los goles a racimos.
- Quien sí está fino es Oyarzabal.
- Es el ejemplo perfecto de lo que es la Real. Al inicio de temporada no hizo sus mejores partidos, pero siempre se caracterizó por su lucha, intensidad y entrega. Ahora, afortunadamente, el fútbol le está pagando con goles y buenos partidos. Su nobleza y su manera de ser le ha permitido ser el comodín de Asier. El otro día terminó de lateral izquierdo.
- ¿Qué tal está Moyá después de la tarde no afortunada que tuvo en el último partido?
- Le puede pasar a cualquiera. Le ha dado la vuelta y está trabajando como el que más, con ganas de estar otra vez en el campo. Hay que olvidarlo.
- ¿Y cómo ve a Rulli?
- Gero está bien. Trabajando fuerte. Sabe esperar su momento. Está luchando por estar a disposición del equipo. Al principio es duro asimilar no jugar, pero ahora está bien.
«Igual que puedo irme en un mes, puedo renovar y quedarme aquí tres o cuatro años más»
- Da la sensación de que prefieren jugar fuera de casa que en Anoeta.
- Hemos tenido buenos partidos en Anoeta, pero los juegos y las victorias nos están costando. Al principio nos resultaba muy complicado ser protagonistas con la pelota. Ahora, por suerte, estamos mejorando en este aspecto. Llegarán los resultados. Fuera de casa, al no tener esa responsabilidad que se tiene en Anoeta, hemos aprovechado los momentos.
- ¿Qué espera mañana en Getafe?
- Su entrenador exige muchísimo a nivel defensivo a sus jugadores, regala poco o nada. Es uno de los equipos que más faltas hace en la Liga. Termina las jugadas y logra superar cualquier situación que intentes generar. Pero todo está muy cerrado en la Liga y tenemos la ilusión de poder ganar los dos partidos que quedan antes de Navidad.
- Después llega el derbi ante el Alavés.
- Sería espectacular empezar mañana trayéndonos los tres puntos contra el Getafe y, después, celebrar Santo Tomás de la mejor manera, con otra victoria en Anoeta.
- Se acerca el mercado de invierno. ¿Va a escuchar otras ofertas o se queda en la Real?
- Me encantaría quedarme. Tengo dos años y medio más de contrato y estoy súper feliz aquí. No puedo prometer que me vaya a quedar aquí porque no depende solo de mí, pero si por mí fuera, encantado de seguir aquí. De la misma manera en la que puedo irme en un mes, puedo renovar y quedarme aquí tres o cuatro años más.
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