Real Sociedad - Mirandés: La diáspora guipuzcoana de Miranda
Merquelanz, Guridi, Kijera, Iraola y Mendia son los cinco guipuzcoanos que intentarán evitar que la Real llegue a una nueva final de Copa
Poco más de hora y media separa San Sebastián de Miranda de Ebro en carretera. Una distancia tolerable para un viaje de ida y vuelta. ... Entre medias, Eibar, Arrasate, Vitoria, La Puebla de Arganzón y ahora una final de Copa de Rey. La posibilidad de cruzarse con un mirandés en Donostia o a un guipuzcoano en la localidad burgalesa no es descabellada. Esta probabilidad, sin embargo, aumenta de manera desproporcionada en un punto exacto del mapa de Miranda: Anduva.
El Mirandés concentra hasta a cinco guipuzcoanos en el club, de puntos bien repartidos del territorio. Hernani, Irun, Azpeitia, Usurbil y Beasain estarán representados en el bando rojillo. Seguro que los habitantes de estas localidades no desearán demasiada suerte a sus vecinos en estas semifinales de Copa. Martín Merquelanz, Jon Guridi, Gorka Kijera, Andoni Iraola y Unai Mendia conforman la diáspora guipuzcoana en suelo mirandés, pero la mayoría de ellos dejarán a un lado sus sentimientos blanquiazules y buscarán privar a la Real Sociedad del sueño de levantar un nuevo título más de treinta años después.
Las buenas relaciones entre ambos clubs han posibilitado las cesiones de hasta tres jugadores realistas al conjunto castellanoleonés. A los canteranos Merquelanz y Guridi se les ha unido en este mercado de invierno Modibo Sagnan, que pese a no ser de la tierra, es un txuri-urdin más. Además de la cordialidad que puede existir entre ambas entidades, no hay que obviar que el hecho de que el entrenador del cuadro mirandesista y su segundo sean guipuzcoanos hacen que su conocimiento por el club blanquiazul sea mayor. Iraola, pese a desarrollar la mayor parte de su carrera en el Athletic, conoce la productividad de Zubieta, mientras que su ayudante, Unai Mendia, es un beasaindarra con experiencia en Ordizia, Aloña Mendi, Idiazabal y Beasain, a los que ha dirigido en categorías de Regional o Tercera. Mendia es un seguidor confeso de la Real y suele acudir al Reale Arena.
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Sobre Merquelanz y Guridi poco más hay que añadir. Los dos son compañeros de la generación del 95 y saben lo que es vestir la camiseta de la Real en Primera División. El irundarra debutó la pasada temporada en Ipurua, pero nada más entrar al terreno de juego se lesionó de gravedad y se pasó el curso en blanco. En el equipo mirandesista ha vuelto a recuperar su mejor nivel y el club blanquiazul ya prepara su vuelta para la próxima campaña. El atacante ha participado en 20 tantos en lo que llevamos de temporada entre goles y asistencias y es una de las grandes estrellas del Mirandés. Guridi también está brillando en el cuadro burgalés. Tras estrenarse con el primer equipo blanquiazul en 2017 en Mendizorroza, el azpeitiarra sufrió una importante lesión de rodilla que le mantuvo apartado del verde mucho tiempo. En el mercado de invierno de la pasada campaña llegó a modo de préstamo al Mirandés y contribuyó en el ascenso a Segunda División. En verano de 2019 volvió a recalar en Miranda de Ebro como cedido y es una de las principales bazas de Iraola en el centro del campo. También está prevista su vuelta a la disciplina donostiarra en cuanto finalice la temporada actual.
El más veterano, el más desconocido
Más desconocido es Gorka Kijera. El hernaniarra también ha sido jugador de la factoría de Zubieta y ha tenido que recorrer un camino más escarpado que sus compañeros hasta llegar a Segunda. Lemona, Bilbao Athletic, Eibar, Cartagena y Real Unión son algunos de los clubs en los que ha llegado a militar el lateral izquierdo antes de recalar en Miranda en 2014. Kijera llegó al cuadro rojillo procedente del Eibar hace seis años y desde entonces no se ha movido de la localidad castellanoleonesa. Su contrato con el Mirandés finalizaba la temporada pasada, pero en verano renovó hasta junio de 2020. El hernaniarra se ha convertido en el jugador con más partidos de la actual plantilla y es el capitán. Ha vivido cuatro campañas en Segunda y dos en Segunda B.
Estos cinco 'exiliados' guipuzcoanos estarán esta vez en el bando rival y celebrarán la eliminación de la Real sin llevarse por los sentimentalismos. Bien haría el conjunto realista en controlar la motivación de cada uno de ellos para que el 18 de abril se transformen en cinco seguidores más del cuadro txuri-urdin.
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